«Sabemos que esta liga es así. Un pequeño fallo o cualquier despiste en alguna acción y los rivales te acaban ganando. Ya son cuatro partidos seguidos en casa en los que perdemos 0-1 y en los que se nos queda cara de tonto al pensar que podíamos haber hecho mucho más. En el vestuario estamos decaídos porque vemos que lo intentamos todo, pero no llegamos o no podemos», indicó Raúl Casañ, técnico del filial peñista.
Precisamente, tras la última derrota sufrida en casa ante el Gimnàstic Manresa, sumada a la complicada y frustrante campaña que está viviendo el equipo en lo que se refiere a resultados positivos desde que se estrenase este año en la categoría, la entidad peñista se ha decantado por activar una nueva operación refuerzo para tratar de apuntalar la plantilla en la medida de lo posible y reforzar al equipo en aquellas demarcaciones en las que se estime más necesario, con especial atención a las posiciones de ataque.
«Estamos buscando refuerzos con idea de intentar mejorar el equipo. Nos interesa cubrir algunas posiciones delante y en las bandas, pero lo que necesitamos por encima de todo es un delantero que nos meta goles», matizó, a este respecto, Raúl Casañ.
El objetivo, claro está, pasa única y exclusivamente por hacer más competitivo al plantel peñista e intentar revertir la actual situación en la que se encuentra el equipo, colista en la clasificación.
«No nos queda más remedio que seguir trabajando y continuar insistiendo en corregir nuestros errores para tratar de cambiar esta dinámica en la que estamos inmersos. Debemos intentar estar más atentos en todo porque son esos errores propios que cometemos los que nos están matando», aseguro el técnico del conjunto filial peñista de División de Honor.
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