En el municipal de Santa Eulària se guardó un minuto de silencio antes de echar a rodar el balón por el fallecimiento de Juan Marí Juan, padre del presidente de la Peña Deportiva. Con el pitido inicial los dos clubes salieron a quemar rueda. El conjunto del Esporles supo barajar mejor sus cartas y no esperó más que tres minutos para abrir el marcador. El mediocentro del club mallorquín Mercant fue el más listo del corrillo que se formó para despejar un balón que pasó por las piernas de varios jugadores. Las indecisiones de la defensa blanca hizo que tras un mal despeje, Mercant enganchara un disparo de bolea que dejó boquiabiertos a la corta entrada de la Peña que estaba en las gradas. La Peña tuvo el empate en el minuto 5 de partido en un mano a mano entre Piquero y el portero del Esporles Juanito, que el ariete blanco no supo aprovechar y estrelló su misil contra las manos del guardameta.
El conjunto de Dani Mori no despertaba del atolladero en el que se había metido. El Esporles parecía en los primeros minutos un equipo hecho a medida, con pases milimetrados, posesión del cuero y buen posicionamiento sobre el terreno de juego. Los jugadores de la Peña no sabían qué hacer para robarles el balón. El conjunto dirigido por Andrés Llisto generaba ocasiones una tras otra claras de gol. Un pase desde la divisoria del campo al defensa del equipo mallorquín Blanc metió el miedo en el cuerpo a los peñistas. Faltó pocos centímetros para atravesar la línea de gol defendida por Torres.
Los de Dani Mori llegaban al área custodiada por Juanito a cuenta gotas. Los blancos tuvieron tres ocasiones con un porcentaje alto de gol, pero no supieron finalizarlas. La última la tuvo Moreno dentro del área del Esporles que se la rebañaron cuando se disponía a armar su bota.
Tras el descanso, y después de transcurrir cinco minutos de juego, Pando recibió un pase de Piquero y la enganchó con un tiro cruzado para subir un tanto al luminoso. Con la vuelta de los vestuarios y el empate a uno en el marcador, los blancos se echaron arriba en busca de más goles. No transcurrió un minuto para que Pau Pomar pusiera por delante a la Peña. Los de Dani Mori se ponían 2-1 a falta de algo más de media hora para el pitido final.
A partir de este período, ambos equipos empezaron a mover fichas para dar refresco al equipo. A falta de quince minutos para el desenlace, el Esporles se vino arriba generando ocasiones de peligro. Hasta que un golazo del Esporles por medio de Toni tras un centro quitó la ilusión a los peñistas. El 2-2 en el marcador acabó con la expulsión de Dani Mori por protestar. Hasta el minuto 93 de partido los dos equipos tuvieron oportunidades para llevarse incluso el partido. Esta vez la Peña no jugó bien sus cartas y volvió a empatar.
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