FORMENTERA: 0

COLLERENSE: 1

El fuerte viento que sopló ayer en la menor de las Pitiüses lo hizo en contra de los intereses del Formentera, que encajó la segunda derrota de la temporada en casa, dejando volar así el liderato del grupo balear de Tercera. Los rojillos fueron incapaces de inquietar a un Collerense que se limitó a defenderse y que, en el último suspiro, sacó petróleo de su único disparo entre los tres palos.

El partido tenía todos los visos de terminar sin gol espero unas claras manos de Micaló dentro de su área en el minuto 88 brindaron al conjunto de Miguel Ángel Espadas la oportunidad de llevarse los tres puntos, ocasión que no desperdiciaron. El local Micaló vio la roja por su acción y el visitante Agus, ya con el tiempo cumplido, transformó la pena máxima y estableció el 0-1 con que terminaría el encuentro.

Tras el tanto visitante, el colegiado Rodríguez Quintero concedió cinco minutos de prolongación. Los de Luis Elcacho se lanzaron en busca de la igualada. Una jugada de Jordi Martí terminó en la jugada polémica del día, ya que fue derribado en el área visitante, lo que encendió a la afición rojilla. El trencilla se inhibió y, ya finalizado el choque, el propio protagonista de este lance indicaría que hubo contacto en dicha acción aunque no para señalar penalti.

Ambos penaltis, el que sirvió al Collerense para marcar el único tanto del encuentro y el que no se concedió sobre Martí, fueron lo más destacado de un partido en el que el Formentera chocó siempre contra el viento.

Previamente, los rojillos dominaron el juego como suelen aunque no supieron dar profundidad a su juego. Górriz se desfondó pero no le llegaron casi balones, en buena parte debido a las fuertes rachas de aire, que jugaron contra la creatividad de los formenterenses. También el viento frenó a los rojillos en las jugadas a balón parado, donde no hubo acierto.

La entrada de Cristian Terán tras el descanso pareció que iba a cambiar el encuentro, con un gol anulado por fuera de juego en el primer minuto de la reanudación. Pero la ventolera siguió maltratando a los rojillos.

Así, sin prácticamente llegadas de los locales, el Collerense tuvo paciencia y supo sacar rédito de una de sus pocas aproximaciones a la meta defendida por Marcos Contreras.