El responsable del motor en la isla indicó que es «muy difícil» fijar una fecha concreta de construcción, pero que «se ha llegado a hablar de un año y medio» de plazo. «Después de muchas semanas de tensión y preocupación, asistimos al resultado de un trabajo que está bien hecho, el punto de partida de un proyecto que llevamos más de 15 años buscando», comentó.
Escandell apuntó también que «lo más destacable» es que «se puede entrenar en Sa Coma» mientras se lleva a cabo el proyecto y «volver al modelo antiguo de hacer carreras en los pueblos, que también para el público es algo interesante». «De alguna forma, el motocross se mantendrá en vida durante la construcción de este circuito, que esperamos que sea en un tiempo récord», agregó.
Pedro Mas, presidente de la Federación Balear de Motociclismo, destacó la «predisposición por parte del equipo de gobierno». El máximo mandatario del ente autonómico afirmó que se ha buscado «una solución viable en cuanto a Sa Coma». «Hemos conseguido que se celebre esta reunión tan deseada por el motociclismo para ver de qué manera podemos tener el circuito definitivo y permanente para que incluso pueda hacerse en él un Campeonato de España o muchos otros eventos. Con la marca Ibiza ya hay muchas posibilidades y el motociclismo sería un punto más de promoción para las islas y nuestro deporte», comentó.
Vía contraria
Mas señaló que el mundo del motocross está «concienciado con el medio ambiente» y cree «plenamente» que se acabará haciendo el circuito de motocross en Eivissa. «En vez de presentar proyectos que después se evalúen, lo vamos a hacer al revés. Iremos a los técnicos para saber qué podemos hacer para practicar nuestro deporte con la mayor dignidad posible y estarán a nuestra disposición. Tanto la comisión de Medio Ambiente como el Consell no nos van a fallar», dijo.
David Ribas, conseller d'Esports, subrayó que están «comenzando a trabajar con un proyecto nuevo» y a llevar a cabo «un nuevo enfoque». «Hay una posibilidad bastante clara de tirar adelante un proyecto con una serie de condicionantes y limitaciones en Sa Coma». Informó que hacer dos circuitos en este recinto «es totalmente inviable» y que «este equipo de gobierno no va a darse más golpes contra la pared». Insistió en que el proyecto anterior «estaba muerto y lo habían dejado morir administrativamente». «Si no hubiera sido así, lo habría matado la comisión de Medio Ambiente, porque era un proyecto totalmente inviable», apuntó.
Ribas destacó que habrá un calendario de reuniones para que todo vaya por el buen cauce, la primera tras el puente de diciembre. «Haremos un calendario para poder trabajar», comentó el conseller, que no pretende «vender humo a nadie» y por eso no se moja a la hora de asegurar si el circuito se acabará haciendo: «No hemos de decirlo nosotros. Lo tienen que confirmar los técnicos».
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