El sucesor de Morillo

A pesar de su corta edad, el ibicenco puede presumir de contar con un gran palmarés: Campeonato de Balears en sala, este año, y segunda posición en el de aire libre, el anterior; decimoctavo en la Copa del Mundo júnior de Nimes en Sala; y quinto en el reciente Campeonato de España de sala júnior, entre otros éxitos.

Pero no hace falta tocar el techo para guardar en la retina otros triunfos. De hecho, no olvida su primer podio. «Quedé tercero en un escolar y conseguí un récord. Fue como un dos por uno y me fui contento a explicárselo a mi madre», indicó. Eso sí, cuando echa la vista atrás, lo que más le satisface es «haber entrado en el Centro de Tecnificación, que había sido mi objetivo claro desde que empecé». «A nivel de resultados, me quedo con mi actuación en Nimes, ya que me sorprendí a mí mismo haciendo récord personal y, a la vez, quedando vigesimoséptimo en el round. Además, para sorpresa mía, estuve cerca de ganar la primera eliminatoria contra el chico que había quedado sexto en el round, por lo que me fui de Francia muy contento», explicó.

Metas

Su objetivo a corto plazo «era hasta hace poco clasificarme para el Mundial, logro que no conseguí a pesar de haber hecho récord en competición, pero ahora mismo mi objetivo principal es conseguir los mejores resultados posibles en las competiciones que quedan esta temporada y voy a preparar muy bien, sobre todo, el campeonato de España absoluto».

Su meta deportiva, ya a largo plazo, es la de todos: «Llegar a tirar en unos Juegos Olímpicos». «Bajo mi punto de vista, para poder entrenar lo suficiente como para conseguir eso, tengo que entrar en la Blume, en Madrid», agregó. Allí ya se encuentra la ibicenca Miriam Alarcón, a la que espera poder acompañar. No en vano, está a la espera de que salgan las resoluciones de este año después de haber solicitado la petición de acceso.

Pendiente de la Blume

Si accede a la Blume y sigue por estos derroteros, no sería descabellado que se convirtiera en el sucesor natural de Dani Morillo, algo que, sin embargo, sabe que tiene una gran dificultad: «La verdad es que me parece algo muy complicado. Todavía es muy pronto como para hablar de alcanzar unos Juegos cuando ni siquiera he salido a un torneo internacional con el equipo nacional. Además, mis compañeros tienen más o menos mi mismo nivel y son arqueros que tiene las mismas papeletas que yo para ser su sucesor. Por si no fuera bastante, el nivel está bastante alto a nivel nacional».

De las palabras de Iván Torres, estudiante de Bachillerato tecnológico en Sa Real, se desprende que tiene la cabeza muy bien amueblada. Con esa actitud y trabajo, los resultados seguirán llegando. Tiempo al tiempo.