El acuerdo, de duración indeterminada, consiste en trabajar la formación de jóvenes jugadores y técnicos en el ámbito del fútbol base. «Los buenos entrenadores tienen que estar abajo», subrayó Garzón. Eso implica también la posibilidad de que las promesas ibicencas más destacadas puedan participar en entrenamientos y campus de la entidad castellonense, así como de que algún futbolista al que le falte aún un empujón para formar parte de los dos principales equipos del cuadro amarillo militen en las filas de la Peña en calidad de cedidos.
El deseo del Villarreal, como apuntó José Luis, es que la Peña «vaya cada vez a más y que alguno de sus jugadores pueda vestir de amarillo y, algún día, jugar en el primer equipo». El ‘submarino' no suele firmar este tipo de convenios con cualquiera. De hecho, «se pueden contar con los dedos de una mano», como apuntó Garzón, que destacó que una de las principales razones por las que han aceptado el vínculo con los de Santa Eulària estriba en que sigue su misma filosofía, que no es otra que «formar personas». «En este sentido, vamos de la mano», agregó el coordinador de la base amarilla, quien también aportó otras razones que han llevado a su club a unirse a la Peña: «Después de unos años viendo sus equipos en nuestros torneos, creemos que está haciendo bien las cosas, tiene ganas de aprender y entrenar cada día mejor. Eso nos motivó mucho a nosotros y creemos que puede aportarnos cosas. Nos queremos ayudar en el futuro».
Con la élite
Los elegidos por el Villarreal podrán incluso acercarse a jugadores del primer equipo, tal y como apuntó Garzón: «Nuestro club es muy accesible y esa posibilidad existe siempre. Si existe la posibilidad y el calendario lo permite, ellos nunca se van a negar, pero también tenemos que entender que es algo complicado, porque el deportista de élite lo suele tener difícil para desplazarse y tener días libres. Precisamente lo hemos hablado hoy –ayer para el lector– y si cabe esta opción, intentaremos ser más cercanos para que los chicos disfruten de los jugadores».
Lo que sí es más una utopía que una realidad es que se pueda disputar un amistoso entre el primer equipo de cada club. «Sobre eso no puedo decir nada. Hay muchas cosas de por medio. Ahora, por ejemplo, se ha cerrado una gira por Australia. Siempre que se pueda, se va a intentar, pero no puedo decir nada. Hay que ir poco a poco y hacer las cosas bien».
Sí que es viable, en cambio, la posibilidad de que el primer equipo de la Peña pueda contar en el futuro, incluso la próxima temporada, con futbolistas de la cantera castellonense. «Antes de firmar, hemos tenido conversaciones para ver si existía la posibilidad de que algún jugador pudiera venir. No es que tengan preferencia, sino que, al tener más contacto, existe la posibilidad de que pueda pasar».
La Peña está muy contenta con el acuerdo. «Somos los más beneficiados, porque ganamos en la formación de entrenadores y aprenderemos técnicas y maneras de dirigir tanto un club como el fútbol base. Tendremos un buen espejo donde mirarnos», indicó Juan Marí. Por su parte, Raúl Casañ añadió que ya está en estudio la opción de hacer un campus junto a ellos aquí este verano». El director deportivo considera que el convenio es muy positivo porque así irán asimilando «su modelo y mejorando el futuro de la Peña».
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