El sorteo resulta favorable

El sorteo se celebró en la sede de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), ubicada en Las Rozas, Madrid. En primer lugar se procedió a emparejar a los equipos que luchan por el ascenso a Segunda División. Acto seguido, llegó el turno de los aspirantes a la categoría de bronce. En primer lugar se sortearon las eliminatorias entre los campeones de grupo, cuyos ganadores darán automáticamente el salto de categoría. El representante balear, en este caso, era el Mallorca B, que se jugará el ascenso contra el Atlético Granadilla. El partido de ida se jugará en tierras mallorquinas.

Poco después se procedió a sortear los emparejamientos entre los segundos, que jugarán la vuelta en casa, y los cuartos clasificados. La Peña Deportiva se exponía a enfrentarse a huesos como el Pontevedra, el Ceuta, el Badajoz, el Tenerife B y Osasuna B, entre otros peces gordos. No es que le haya tocado una perita en dulce, porque no hay ninguna, pero el Anguiano riojano es, en principio, un rival asequible. Se encuentra en una localidad con poco más de 500 habitantes y la presión de la grada no puede ser, por tanto, tan influyente como la de otros campos.

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