«No me veo otra vez con la camiseta de la Peña»

—¿Está viviendo una segunda juventud?
—En el sentido de que he estado un tiempo lesionado, sí, porque me apetecía mucho volver a jugar. Ya dije la semana pasada que el San Rafael me dio la oportunidad de volver a jugar y me encuentro bien. Llevo mucho tiempo sin lesionarme y a gusto.

—Diez goles y varias asistencias. ¿Se siente en el mejor momento de su carrera?
–No. Aún me queda mucho, porque he estado casi un año sin jugar. Con la recaída que sufrí en su día tuve un parón y cuesta mucho coger la forma. Cada día voy a mejor y espero seguir así.

—Ese agradecimiento público al San Rafael sonó y suena a pullita a la Peña, de donde salió por la puerta de atrás.
–No, para nada. Comenté eso para agradecer al San Rafael el hecho de que apostara por mí. No lo dije por la Peña. Es algo que iba para las personas que pensaban que no podía jugar al fútbol. El madridista Marcelo sufrió la misma lesión. Requiere una operación y un plazo de tres meses de recuperación, pero podía seguir jugando perfectamente.

—Piquero vivió una situación parecida a la suya. Se fue sin protagonismo de la Peña y brilló en el ‘San Rafi' un año después. ¿Qué tienen los ‘blue' que los peñistas triunfen en este equipo?
—Todos conocen a Piquero y es un buen jugador esté en la Peña o en el San Rafael. Decidí irme al San Rafael porque estaba aquí, en la Isla, en un equipo en el que me gustaba el objetivo marcado. Se trata de un conjunto con gente de aquí que lucha por la permanencia. Se me planteó la posibilidad de jugar tras mi lesión y me gustó la idea desde el primer momento.

—¿Se ve, como Piquero, vistiendo de nuevo la elástica peñista?
—No. Ahora mismo, lo único que me interesa es conseguir la permanencia con el San Rafael. Es lo único en lo que pienso. El año que viene ya veremos si me quedo o me voy.

—Pese a lo bien que lo está haciendo, no todo son luces este curso. Vicente Román le sentó al descanso en el derbi contra el Isleño y a la jornada siguiente le dio ‘banquillazo' hasta el minuto 70 contra el Santanyí. ¿Cómo le sentó eso?
—A ninguno le gusta estar sin jugar, pero hay que entender que somos 22 compañeros. Hay momentos en la temporada en que unos están mejor que otros por diversas circunstancias o porque no has tenido una buena adaptación a esa semana de entrenamientos. Y no pasa nada. Cuando eso sucede, hay que aceptarlo y seguir trabajando para intentar volver a jugar.

—Lo cierto es que parece que esa decisión despertó al gran futbolista que usted lleva dentro.
—No pienso que fuese un toque de atención. Sabía que, después de tanto tiempo parado, no iba a mantener un ritmo fijo todo el año. No lo hacen los profesionales, ¿lo voy a hacer yo? Por suerte, empecé a sentirme bien en los entrenamientos y, gracias al ‘fisio' y al preparador físico, m e recuperé cuando tuve molestias en los isquiotibiables. Estoy muy bien físicamente.

—¿De verdad alguien se cree en el vestuario que la permanencia es a todo lo que puede aspirar este equipo?
—Cuando empezamos el año, sabíamos que era por lo que íbamos a luchar. Llevamos más de la mitad de la liga metidos abajo, alrededor del decimocuarto puesto. Sinceramente, lo único que queremos es la permanencia. No podemos decir que aspiramos a otra cosa porque llevamos todo el año peleando por salvarnos.

—¿Y usted cree que no hay equipo para más?
—Hay buenos futbolistas, pero los demás equipos también los tienen. Si estamos en la clasificación en la zona media es porque hemos ido mejorando poco a poco y hemos subido posiciones. Esperemos conseguir la salvación pronto y si luego aspiramos a algo más, mejor.

—Manacor, Campos, Formentera y Collerense, rivales del mes de marzo. ¿Se va a ver ahí la verdadera aspiración del San Rafael?
—Ya hemos venido hablando de eso. Son partidos que perdimos en la primera vuelta. Si sacamos algo positivo, tendremos la permanencia firmada.

—¿Se atreve a pronosticar la cantidad de goles con la que acabará usted el curso?
—No me atrevo a pronosticar nada. Simplemente quiero ayudar a mis compañeros y al club con mi aportación, que debe ser el gol, y cuantos más marque, mejor.