La Peña Deportiva busca como agua de mayo las mini vacaciones navideñas para tratar de recuperar moral y físicamente a una plantilla sumida en la confusión y el nerviosismo. Ese pequeño parón en el que los futbolistas disfrutarán de una semana de asueto y un calendario algo más benévolo para los de Santa Eulària son los únicos aliados de un club en recesión.
Montuïri, Felanitx, Collerense y Arenal son los cuatro próximos adversarios del grupo de Luis Rueda, conjuntos que deambulan en la zona media y baja de la clasificación y que deben servir como punto de inflexión para mirar con optimismo al futuro. Después de la estrepitosa derrota el domingo ante el Poblense (0-2), la peña se encuentra octava a nueve puntos del play off de ascenso a Segunda División B.
Semana de reuniones
Mientras el vestuario se reunió tras el partido para conjurarse de cara al futuro, el club mantendrá hoy una importante junta en la que podría tomar alguna medida con la plantilla. Luis Rueda, que ayer dio un toque de atención al equipo por la imagen ofrecida ante el Poblense (0-2), tiene la confianza plena de la directiva y el presidente, pero algunos futbolistas están en el punto de mira después de sus últimas actuaciones. Esta semana podría ser decisiva en ese sentido.
Claves de una crisis
Algunas de las claves que explican el actual estado de alarma en el primer equipo son evidentes: el recorte económico que sufrió el club en verano no permitió hacer una plantilla extensa y competitiva como la del ejercicio anterior. Varios futbolistas comenzaron la pretemporada lesionados -casos de Osky, Edu Moral, Maxi Re o Pierre Cotant- y aún hoy arrastran problemas físicos. A ellos se han ido uniendo en la enfermería jugadores como Diego Piquero, que lleva más de un mes en el dique seco; Miguel Àngel Bazán o Raúl Casañ, que juega con dolores, como en el caso de Edu, porque no hay sustitutos en su puesto. Ahora también ha caído el todoterreno Fofi, aunque parece que su esguince de tobillo no reviste mayor gravedad.
A estas causas, ajenas a la calidad y la ambición de la plantilla, se unen las dolorosas derrotas con los tres 'grandes' de la categoría y una falta de actitud en algunos miembros del equipo.
Es incuestionable que muchos de los fichajes y de los futbolistas llamados a liderar el grupo no están rindiendo al nivel esperado, pero no hay que olvidar que Luis Rueda aún no ha podido disponer de la totalidad de la plantilla y que muchos de sus integrantes han puesto el grito en el cielo por el pésimo estado del terreno de juego del Municipal, el gran causante de los problemas físicos del equipo.
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