Alfonso Gil BLOEMFONTEIN

Brasil inicia hoy (16.00 horas, Tele 5) la defensa del título de la Copa de las Confederaciones que ganó hace cuatro años en Alemania con la intención de revalidarlo, con un partido en el que parte como favorito ante Egipto, que quiere sorprenderle para tener opciones de alcanzar la segunda fase del torneo.

El grupo B del torneo, considerado el más complicado de los dos, cuenta, además de con Brasil y Egipto, con las selecciones de Italia y Estados Unidos, por lo que el equipo que pierda en este debut tendrá que realizar un esfuerzo importante para recuperar la ventaja perdida.

Brasil afronta la competición con la confianza que da haber allanado su camino hacia el Mundial con la victoria del pasado miércoles ante Paraguay y con la necesidad de cambiar de mentalidad para afrontar una competición completamente diferente.

Carlos Verri «Dunga», seleccionador nacional brasileño, cuenta con el bloque con el que ha jugado en los últimos encuentros, por lo que debutará con el equipo que dejó ver en el entrenamiento del sábado.

Por ello, todo hace pensar que Dunga tiene claro el equipo y que contará con Dani Alves en el lateral derecho y no con Maicon, mientras que el jugador más ofensivo, por delante de Kaká, será Luis Fabiano.

Con Julio César en la portería y Alves y Kleber en los laterales, el centro de la zaga será para Lucio y Juan, por delante de los cuales estarán gilberto Silva y Felipe Melo, con Elano por la derecha, Robinho por la izquierda, y Kaká y Luis Fabiano en el ataque.

Los brasileños están mucho más pendientes de lo que pueda hacer su equipo que del potencial del rival, un equipo que se presenta como campeón de Africa pero que llega con alguna bajas y sobre todo con muchas dificultades de cara a la clasificación para regresar dentro de un año a Sudáfrica, esta vez para disputar el Mundial.

Hassan Shehata, seleccionador nacional egipcio, lamenta las ausencias en su equipo de Zaki y de otros futbolistas importantes, pero está confiado en que su equipo dejará alto el pabellón del fútbol africano en este torneo.

Para Egipto la Copa de las Confederaciones es un torneo importante, ya que no lo disputan desde la participación en la edición de México en 1999 y, además, es una oportunidad para tratar de conjuntar al equipo de cara a los partidos que restan en las eliminatorias de cara al Mundial del año que viene.

La noticia de la víspera del partido estuvo en la imposibilidad de realizar el reconocimiento al estadio del encuentro, el Free State, por parte de los dos equipos.