«El equipo no ha estado bien, especialmente en ataque, y hemos perdido merecidamente ante un buen equipo, que supo sacar partido de un par de indecisiones nuestras, como en la jugada que nos costó un gol en la que ninguno de los dos centrales supo atajar el balón que le mandaron al punta». Alfredo Santaelena reconoció así que los suyos no hicieron méritos para más. El técnico rojillo también lamentó la falta de conexión entre el centro del campo y su delantero Diop, al que impidieron «generar ocasiones claras de gol. Sólo dimos señales de vida en jugadas a balón parado, como saques de esquina o en un par de faltas laterales». Al entrenador del Eivissa no se mostró pesimista: «Quedan 21 puntos y me siento optimista». El míster del conjunto ibicenco definió a su equipo como un bloque de dos caras, capaz de lo mejor y lo peor. «Lo demostramos haciendo un partidazo ante el Alcoyano y, sin embargo, no hemos sabido repetir el mismo nivel aquí», dijo.