Europa Press

El FC Barcelona y el Villarreal quieren evitar un duelo fratricida en el sorteo de los cuartos de final y semifinales correspondiente a la Liga de Campeones, que se celebrará hoy en Nyon (Suiza) a partir de las 12,00 horas.

Los dos equipos españoles compartirán bombo con los cuatro ingleses (Liverpool, Arsenal, Manchester y Chelsea), además de con el campeón alemán, el Bayern de Munich, y el campeón portugués, el Oporto. En el sorteo ya se decidirá todos los cruces que deberán superar los equipos que quieran estar en la final de Roma el 27 mayo.

Tanto los jugadores azulgrana como los amarillos quieren evitar a toda costa un enfrentamiento en los cuartos de final de la competición, como así han declarado algunos jugadores en los últimos días.

Al margen del duelo entre ambos, Barcelona y Villarreal también suspiran por evitar al Liverpool que entrena Rafa Benítez, y más después de sus últimas actuaciones ante el Real Madrid en la Champions y el Manchester United en la Premier.

Otro de los rivales a evitar es el Chelsea, que, de la mano del holandés Guus Hiddink, ha dado un paso adelante en Europa tras eliminar con relativa comodidad a la Juventus, mientras que en la Premier se ha colocado segundo tras una buena racha de resultados. Además, el ariete Drogba vuelve a ser el jugador determinante que era.

Al margen de los equipos ingleses, el Barcelona o el Villarreal pueden quedar emparejados con un Bayern de Munich que esta temporada tiene dos versiones: la de la Liga de Campeones, donde camina con paso firme tras eliminar al Sporting por un global de 12-1, y la de las competiciones domésticas, donde se muestra más irregular.

A priori, el rival más accesible podría ser el Oporto. Y eso que el conjunto luso fue el verdugo del Alético de Madrid en los octavos de final. Los dragones cuentan en sus filas con el delantero Lissandro, que, con seis goles en la Champions, ocupa un lugar privilegiado en la clasificación de anotadores. Sin embargo, es el equipo que ha pasado a cuartos que más goles recibe. Los portugueses, los tapados de la competición, no serán un rival fácil, pero, visto el resto de equipos, parece el más apetecible.

El Bayern, igualmente, sería un rival incómodo para el Barça. No en vano, en la liguilla de 1998-99, los bávaros ganaron los dos encuentros y siempre se han mostrado como un rival muy competitivo, y tienen el peligro de contar en sus filas con el codiciado Ribéry.