Corbera 4

Gasifred Ciutat d'Eivissa 4

CORBERA: Guille; Ernest, Héctor, Óscar Santos y Bosco -cinco inicial-, Pita, Marc Rodríguez, Miguel y Domenec.

GASIFRED: Iván; Luis Coria, Miguelito, Ernesto y Clayton -cinco inicial-, Nino, Dani Galiana, Roberto Herrero y Julio.

Àrbitros: Javier Cano y Alberto Centeno (Barcelona). Amonestaron con tarjeta amarilla a Héctor y Óscar Santos, del Corbera, así como a Clayton y Roberto Herrero, del Gasifred.

Goles:

1-0, minuto 7, Ernest.

2-0, minuto 14, Héctor.

3-0, minuto 22, Ernest.

3-1, minuto 29, Luis Coria.

3-2, minuto 30, Bosco, en propia puerta.

4-2, minuto 31, Bosco.

4-3, minuto 34, Guille, en propia puerta.

4-4, minuto 36, Luis Coria.

Incidencias: Partido disputado en el pabellón Municipal de Corbera ante la presencia de aproximadamente 150 espectadores.

Redacción

El Gasifred está vivo y, lo que es más importante, sigue dependiendo de sí mismo para conseguir el título liguero, lo que le brindaría el ascenso automático a la División de Plata del fútbol sala nacional. El equipo azulino no firmaba el empate antes de visitar al líder, el Corbera, en la tarde de ayer, pero, visto el desarrollo del partido, se puede dar por satisfecho. No en vano, llegó a toparse con un 3-0 al inicio del segundo periodo, una ventaja considerable que, sin embargo, supo contrarrestar como sólo él sabe: con casta, calidad, paciencia... y el portero-jugador.

El partido tuvo una historia muy similar a la del partido de la primera vuelta. Desde el comienzo del choque, el equipo de José Luis Pérez Escrich se hizo con la posesión del balón. Sin embargo, los locales sólo necesitaron tres llegadas para marcar dos goles y desesperar a los visitantes. En el minuto siete, Ernest marcó a placer y, en el 14', un contragolpe finalizado por Héctor supuso el 2-0 con el que se llegó al descanso, un castigo excesivo para un Gasifred que tocaba mejor el balón.

La reanudación

Tras el asueto, Ernest volvió a ver puerta y a Escrich no le quedó otra que arriesgar ya con el portero-jugador. Y eso que quedaba casi todo el segundo acto por delante. Tocaba apuntarse a la heroica y hacer una de esas gestas que ya se han visto esta temporada, como la del choque ante el Centelles -el Gasifred remontó un 4-7 en dos minutos y 40 segundos-. La reacción no tardó en llegar. Luis Coria redujo distancias un minuto antes de que Bosco introdujera el balón en su propia meta cuando intentaba evitar el remate a placer de un jugador ibicenco. 3-2 y el miedo en el cuerpo de los locales.

El Corbera se encontró entonces con un regalo de Roberto Herrero. El cierre perdió el balón cuando intentaba sacarlo jugado desde atrás y Bosco marcó a puerta vacía, resarciéndose así de su autogol. Era el minuto 31 y todavía no estaba todo el pescado vencido. Otro gol en propia puerta, esta vez de Guille, y uno de Coria pusieron las tablas en el marcador.

El Gasifred lo tenía entonces todo a su favor. El Corbera sentía miedo, mientras que la moral del equipo ibicenco, mucho mejor físicamente, estaba por las nubes. Quizá por eso siguió apostando por el portero-jugador y llegó a disfrutar de dos ocasiones de gol que los defensas sacaron en la misma línea. Finalmente, se conformó con un punto magnífico a tenor de otro resultado de la jornada de ayer, pues el Centelles, tercero, también empató.

«Se ha sufrido bastante, pero no es mal resultado tal y como iba el partido». José Luis Pérez Escrich, entrenador del Gasifred, se mostró así «satisfecho» con el punto, ya que «el objetivo era no perder». El técnico recordó que tenemos «el comodín del partido aplazado, que lo tenemos ahí guardado», pero no ocultó que «quedan muchas batallas, en concreto ocho finales». De hecho, no se fía de próximo rival, el Santvicentí: «Después de un partido de tensión, crees que no te van a plantear problemas y viene el susto, así que no nos podemos relajar».