Alfredo Santaelena, actual técnico del Eivissa.

Se agota el tiempo y la SE Eivissa sigue sin levantar cabeza. El equipo rojillo está viviendo una temporada de infarto, un thriller cuyo final se conocerá el 10 de mayo, día en que concluye la competición. Los cambios producidos en el banquillo no han servido, de momento, para activar las pilas de una plantilla ahogada en la zona de descenso prácticamente desde el inicio. Desde el despido de Joan Francesc Ferrer Rubi, que duró 11 jornadas, ni Quique Yagüe, quien llevó el timón rojillo en nueve encuentros, ni Alfredo Santaelena, que se estrenó en la vigesimoprimera jornada, han conseguido sacar al conjunto ibicenco del pozo de la tabla. Es más, el último en llegar ha cosechado los peores registros.

Desde la llegada al banquillo del ex futbolista del Atlético de Madrid, el cuadro de Can Misses sólo ha sido capaz de sumar dos puntos de 15 posibles en cinco jornadas. El único lado positivo de estas cifras se encuentra en que los dos últimos partidos no los perdió. Después de caer contra el Benidorm (2-0), la Peña Deportiva Santa Eulària (1-2) y la Gramanet (4-2), la SE Eivissa ha cosechado dos empates consecutivos, uno en casa contra el Sant Andreu (1-1) y otro en el feudo del Atlètic Balears (0-0).

Estos guarismos son peores que los de Rubi y Yagüe. El catalán obtuvo cuatro puntos en sus cinco primeros duelos ligueros. Debutó con derrota en Sabadell (0-0), venció al Benidorm (3-2) en el primer partido de la campaña en Can Misses, salió derrotado en el derbi insular (2-0), firmó tablas con la Gramanet (2-2) en casa y sucumbió en su visita al Sant Andreu (2-1). En resumen: una victoria, un empate, tres derrotas y cuatro puntos.

El único de los tres técnicos que se estrenó en el banquillo sin una derrota -para que luego digan que a entrenador nuevo, victoria segura- fue Yagüe. El abulense, quien tuvo la suerte de comenzar con dos partidos consecutivos en Can Misses, empató contra el Lleida (1-1), la Badalona (1-1) y el Terrassa (0-0) antes de lograr su primera victoria ante el Gavà (3-1). Posteriormente, firmó tablas en el campo del Valencia Mestalla (1-1). Así las cosas, con cuatro empates y una victoria en su haber, el segundo entrenador del curso ha sido el que mejores números ha firmado en su llegada. Además, puede presumir de no haber cedido ninguna derrota en más de un mes.