La selección española de karate logró en Tokio un total de cinco medallas, tres de bronce y dos de plata, en un mundial en el que echó de menos el oro, al que se habían acostumbrado durante los últimos campeonatos.
Los españoles finalizaron su cuarta jornada de competición en el Nippon Budokan de Tokio con el bronce de Cristina Feo en kumite femenino de más de 60 kilogramos, la primera medalla individual en un mundial de la catalana en su carrera.
Además del bronce, esta karateka recibió también el jueves la medalla de plata en kumite femenino por equipos, junto con sus compañeras, la ibicenca Irene Colomar y las canarias Carmen Vicente y Gloria Casanova.
Esta última fue la responsable también de la otra medalla de plata española, al quedar segunda del Open femenino de kumite tras ser derrotada en la final por una japonesa por una polémica decisión arbitral.
La kata española también triunfó en el mundial de Japón, y así, el equipo femenino, compuesto por Almudena Muñoz, Ruth Jiménez y Fátima de Acuña, se hizo con el bronce, revalidando así el título obtenido en el mundial de Tampere (Finlandia) en 2006.
Por su parte Oscar Vázquez, Antonio Sánchez, Iván Leal y Francisco Javier Patxi Martínez, el equipo de kumite masculino, lo dieron todo; sin embargo, la suerte no les acompañó sobre el tatami. Por equipos, los ex campeones mundiales tuvieron que conformarse con el bronce y, en las competiciones individuales, ninguno logró hacerse con un metal.
Por equipos el país que más metales logró fue el anfitrión, Japón, que consiguió nueve, mientras que España ocupó el décimosegundo puesto en el medallero.
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