Jonan García, futbolista de la SE Eivissa, sortea a dos adversarios en el partido celebrado ayer en el Narcís Sala.

E. Pareja (Àrea 11) BARCELONA

Tres salidas, tres derrotas. El Eivissa sigue sin ganar y sin conseguir un punto lejos de Can Misses. Tampoco en el Narcís Sala, ante el Sant Andreu, pudo obtener algo positivo el equipo de Joan Francesc Ferrer Rubi, aunque hizo méritos para, al menos, empatar. A pesar de haberse adelantado en el marcador, con un gol de Javi Moreno en el 35', el cuadro rojillo volvió a perder.

Aunque el Eivissa salió con dos hombres en punta, el Sant Andreu llevó la iniciativa del juego desde el primer momento. El equipo de Rubi comenzó bien posicionado sobre el terreno, pero no tuvo más remedio que admitir el dominio del rival por las ganas y el empuje que mostraron los jugadores cuatribarrados en cuanto el colegiado de la contienda dio el pitido inicial.

En el minuto dos, Abraham quiso poner a prueba al cancerbero, pero su disparo salió desviado. En el diez, cuando el conjunto pitiuso no se había acercado todavía a las inmediaciones del área local, Manu detuvo el remate de un delantero catalán en una falta.

Poco a poco, el dominio de los hombres de Natxo González fue diluyéndose. Es cierto que la posesión del balón seguía siendo del Sant Andreu, pero eso no le servía para crear ocasiones de gol. En el ecuador del primer periodo, concretamente en el minuto 23, Javi Moreno protagonizó el primer ataque con peligro para la portería de Morales, aunque el centro con el que acabó la jugada no encontró rematador.

Mucho mejor para los intereses del Eivissa acabó su segunda ocasión, que llegó en el minuto 35. El protagonista de la misma volvió a ser El Búfalo. Se hizo con el balón en la zona de tres cuartos y, por un momento, recordó al jugador veloz y potente que hace unas temporadas le llevó a ser el máximo goleador de Primera División. Por rapidez y fuerza se marchó de Moyano y Luso, los dos defensores, que, uno detrás de otro, trataron de cortar su avance; se plantó ante Morales y le batió de fuerte chut a media altura. Impresionante. Sin embargo, poco le duró la alegría al Eivissa. Tres minutos después, una jugada entre Lanzarote y Sierra acabó con un disparo de éste, que fue repelido por la base del poste de la portería de Manu. Atento a la jugada y adelantándose a la defensa isleña, Karanka incrustó el esférico en el interior de la meta. Restablecida la igualdad, los minutos finales del primer acto transcurrieron igual que los anteriores, con dominio catalán. El Sant Andreu pudo irse al descanso con ventaja si Pons, en el tiempo añadido, hubiera acertado a rematar un centro de Abraham, pero no fue así.

Mejoría sin premio

En el segundo tiempo se vio a un Eivissa con mayor ambición. El Santa Andreu, por contra, comenzó más contemplativo. Cedió la iniciativa a su oponente, quizá para tratar de sorprender a la contra. A los tres minutos, Julien remató un medido pase de De Pablos, aunque el árbitro invalidó la jugada por fuera de juego del francés.

En el minuto 52 llegó la primera jugada polémica del encuentro. Jose García recibió el balón de Ibon Begoña, se internó por su banda y centró al área, donde Joan Castillo cabeceó al fondo de las mallas. El colegiado, sin embargo, anuló el tanto por fuera de juego del central del Eivissa. La segunda acción controvertida tuvo lugar dos minutos más tarde, cuando Lanzarote cayó dentro del área visitante. Pareció que Manu le había aderribado, pero García Castillo no sólo no pitó la pena máxima, sino que amonestó con tarjeta amarilla al jugador del Sant Andreu por entender que se tiró.

El choque entró en unos minutos de juego insulso en el centro del campo hasta que, en el 78', un córner lanzado por el Eivissa acabó en las manos de Morales. El portero sacó rápido hacia Oriol. El delantero aprovechó la indecisión de los defensas para controlar, avanzar unos metros y sorprender a Manu con un tiro cruzado. Oriol llevaba sólo cu atro minutos en el campo. El Eivissa se lanzó en pos del empa te, pero no tuvo claridad de ideas para crear jugadas de gol.