Gasifred 3

Olympic Floresta 3

GASIFRED CIUTAT D'EIVISSA: Iván; Roberto Herrero, Ernesto, Miguelito y Clayton -cinco inicial-, Sebas, Carlos Gómez, Lucas, Nino y Julio.

OLYMPIC FLORESTA: Alejandro; Fernando, Jaume, Xaloc, Rubén y Gerard -cinco inicial-, Marc, Daniel, Martí, Cedric y Marc II.

Àrbitro: José Cañizares y Héctor Ramón. Amonestaron con tarjeta amarilla al local Ernesto y al visitante Gerard.

Goles:

1-0, minuto 6, Roberto Herrero. 1-1, minuto 7, Rubén. 2-1, minuto 12, Sebas. 2-2, minuto 18, Rubén. 2-3, minuto 20, Xaloc. 3-3, minuto 28, Ernesto.

Incidencias: Primera jornada de Liga en Primera A, disputada en el pabellón Blancadona ante 150 espectadores.

Tomás Sánchez Venzalá

El Gasifred Ciutat d'Eivissa no tuvo el debut soñado en Primera A al ceder un empate contra el recién ascendido Olympic Floresta, un mal resultado sobre el papel, pero un magnífico punto en realidad, puesto que los visitantes pudieron llevarse el gato al agua en el último suspiro de no ser por Julio. El cancerbero evitó la derrota en un tiro de castigo de Rubén a falta de siete segundos.

Los pitiusos saltaron a la cancha más enchufados que su rival. Miguelito sólo necesitó 50 segundos para rozar el 1-0, pero Alejandro, al que los azulinos hicieron lucirse con disparos carentes de maldad, desbarató la ocasión. Tras varios intentos, Roberto aprovechó una pared con Clayton para desnivelar la balanza en el minuto seis, pero la alegría duró lo mismo que el humo de un cigarro, pues Rubén empató en la siguiente acción.

El cuadro de Carlos Sánchez llevaba el peso del partido, pero le faltaba gol. Entonces, Sebas se inventó un obús desde 14 metros para adelantar de nuevo a los suyos. El problema llegó en forma de faltas. Los locales acumularon la quinta y Rubén igualó la contienda en el 18' desde el punto de los diez metros. Tuvo otro tiro igual para fabricar el 2-3 antes del descanso, pero fue su compañero Xaloc, a falta de un segundo, el que lo hizo.

Tras la reanudación, sólo hubo un equipo sobre la pista: el Gasifred. Sin embargo, sólo vio puerta una vez cuando Clayton se inventó un pase picado para que Ernesto rematara de cabeza a las mallas.

El final fue de infarto. Nino lanzó al palo en el minuto 39, pero Rubén disfrutó de una ocasión más clara en el último suspiro desde los diez metros. Menos mal que delante estaba Julio.