Ha sido in extremis, pero Daniel Morillo ya tiene en sus manos el billete para Pekín. El arquero ibicenco se jugaba su última opción ayer en el torneo clasificatorio para los Juegos Olímpicos dentro de la Copa del Mundo que se disputa en Boe (Francia), en una competición abierta únicamente a aquellos países que aún no habían conseguido su pase para la máxima cita continental. Morillo tenía que acabar entre los cinco primeros y finalizó, justamente, el quinto tras ser eliminado en cuartos de final. «Todavía estoy asimilando la noticia. Sabía en cuanto tiré la última flecha que, aunque había perdido en cuartos, ya estaba clasificado. Aún no me lo puedo creer. El objetivo en Pekín será disfrutar mucho y aprender, porque aún soy muy joven y espero que en el futuro puedan venir más Olimpiadas», afirmó el arquero, de 20 años de edad.

El representante del club S'Arc de Eivissa partía como el tercer máximo favorito en la competición. Su primer rival fue el ecuatoriano Nino Villacreces, al que venció con contundencia. Casi una paliza. 114-89. Ya estaba en dieciseisavos. En esa ronda le tocó el eslovaco Vladimir Hrin y nuevo victoria: 114-108. El siguiente escollo era el venezolano Manuel Díaz y el triunfo ya fue más ajustado: 106-102. Había pasado en cuartos de final. Ahí se acabó su trayecvtoria, tras caer ante el bielorruso Maxim Kunda, que luego se colgaría el bronce, por 109-108. No había conseguido entrar en las semifinales, pero no hacía falta. Había logrado la mejor puntuación de todos los arqueros que habían caído en cuartos de final y se clasificaba en quinta posición. «Era la última oportunidad para lograr la clasificación y por suerte he podido aprovecharla. Ahora tengo que variar la programación de la temporada porque, lógicamente, este hecho lo cambia todo», asegura el ibicenco.

Peor suerte que Morillo lo tuvieron José Raúl Riera y Beatriz Cabrero. Mientras que Riera sigue demostrando que no está en su mejor momento y perdió en primera ronda, Cabrero rozó la clasificación, aunque su derrota en octavos ante la suiza Dielen (109-103) hizo que acabara la competición en la novena plaza.