Un viejo conocido para empezar

Francisco Parra, presidente del club pitiuso, manifestó que «jugar una liguilla de ascenso siempre es bueno. Ahora toca afrontarlo con la ilusión máxima por lograr el ascenso».

El hecho de enfrentarse otra vez al Artà no significa que haya ánimo de revancha, según el máximo mandatario del Portmany: «Esperamos que este año cambien las tornas, pero con el ánimo de eliminarlos y pasar a la siguiente eliminatoria, pero sin pensar en revancha, porque esto es deporte», aseveró.

Respecto al adversario que les ha tocado en suerte, el dirigente ibicenco señaló: «Básicamente tiene el mismo bloque del año pasado. Este año ha quedado sexto de la liga y confían en la gente de la zona. No nos podemos fiar».

Parra opinó que en caso de llegar a la segunda eliminatoria da igual el rival al que se enfrenten, porque «si se quiere subir a Tercera hay que pelearse con los mejores».

El hecho de que algún equipo de la Tercera balear pueda ascender a Segunda B podría dejar un hueco para los equipos que no queden campeones de sus grupos en la fase de ascenso a Tercera. En ese caso, los perdedores de la segunda eliminatoria se enfrentarían entre sí en campo neutral y el vencedor ascendería. En caso de que sean dos los equipos baleares que suban a Segunda B, no haría falta jugar esa eliminatoria. «Es un arma que tenemos ahí, pero pensamos que tenemos que ascender por méritos propios», acabó Parra.