C. Vidal
Iván Martín, justo cuatro meses después, puede regresar a la convocatoria del Arzuaga&Gasifred en el encuentro de mañana ante el Grupo GSI Bilbo. El portero se rompió el talón de Aquiles de su pie derecho durante un entrenamiento el pasado 28 de noviembre y ahora, 125 días después, «empiezo a volver a sentirme como un deportista». «Los dos primeros meses los pasé muy mal, porque no podía ni apoyar el pie y, a partir del tercero la cosa ya se hizo algo más llevadera. De todas formas, no he podido empezar a entrenarme con el resto del equipo hasta hace apenas dos semanas y, hasta que no me vuelva a ver sobre un terreno de juego, no me sentiré un jugador de fútbol sala», declara.

En principio, Jandro Àlvarez, entrenador del Arzuaga, confirmó que Iván entrará en la lista, aunque todavía es muy pronto para que reaparezca con el equipo. «No vale la pena arriesgar aunque, ahora mismo, sí estaría para jugar algunos minutos. La demarcación de portero no es igual a la de otro jugador y, aunque llevo poco tiempo entrenándome y me falta coger tono muscular, no pasaría nada porque saliese a la pista», añade Iván. Lo que sí es seguro es que el recibimiento de la afición, sobre todo de la Peña Iván El Muro, va a ser muy especial mañana. «Seguro que será muy bueno, pero espero que sea mejor cuando puede jugar ya con nomalidad», añade.