Sánchez y Planells, pareja campeona

En el circuito de Cala Bassa una veintena de pilotos participaron en esta prueba que va cogiendo tradición en el calendario del motociclismo pitiuso. Además, el recorrido sufrió varios cambios para esta prueba, ya que se alargó el trazado, se anularon los saltos de motocross y se colocaron varios obstáculos que aumentaron la dificultad.

Una vez iniciada la competición, el circuito se encargó de hacer la primera criva, puesto que la parte baja del mismo con tierra blanda y arena fue clave en el agotamiento de los participantes.

Debido a este desgaste la organización de la prueba, de acuerdo con los pilotos, decidió acortar su duración a la mitad, dejándola en tres horas. Antes de la decisión varios de los participantes habían abandonado por rotura de su motor.

Por detrás de los vencedores, que sumaron un total de 62 vueltas, se clasificó el equipo formado por José Luis Torres Ferrer y Vicente Bonet Tur, sobre una Kawasaki, que realizó 60 giros al circuito. En tercera posición entró la pareja formada por Rubén Cervantes Riera y Carlos Torres Ferrer, que con una Honda sumaron 58 vueltas.