No falta nadie. Están todos. El Mundial cerró anoche sus puertas y dejo encerrados en un cuadro de lujo a las dieciséis mejores selecciones del planeta. Quizás se eche en falta a la República Checa, pero nadie puede poner en duda la grandeza que destilan los octavos de final de Alemania'06. Ha llegado la hora de la verdad.

España, que ha cerrado la primera fase del torneo invicta (tres victorias) y con unos números notables, se cruzará con Francia, probablemente, el único del grupo «G» al que no quería ver ni en pintura. El conjunto galo evitó el desastre en la última jornada. Superó a Togo (2-0) y agarró la segunda plaza. Suiza impuso sus credenciales sobre Corea del Sur (2-0) y se apropió del primer puesto. Sobre el papel, el cuadro helvético es favorito en su pulso con Ucrania, que obtuvo su billete para octavos tras superar a Túnez (1-0).

Es la tercera vez que España finaliza la primera fase de un Mundial con su cuenta corriente repleta de victorias, aunque el camino aparece ahora plagado de curvas. Si Francia lleva tiempo atrapada por las dudas y hasta ayer flirteo de nuevo con el naufragio que protagonizó en Corea y Japón (2002), el talento de sus futbolistas es incuestionable. Ante Togo y sin Zidane -el capitán vio el partido desde la grada por sanción-, ofreció su mejor cara. Fue Thierry Henry quien se hizo con los galones del equipo francés y restañó viejas heridas.

Aparentemente rehabilitada -ahí está también Trezeguet-, será Francia un rival de altura para el combinado de Luis. De hecho, a excepción de Portugal (se medirá a Holanda), España es el campeón de grupo que deberá afrontar el reto más exigente de los octavos de final. El cartel de hoy: Alemania-Suecia y Argentina-México. Empieza el Mundial.