La ley de Ronaldo

Cambios: Koji Nakata (H) por Ogasawara, Takahara (H) por Maki, Oguro (H) por Nakata.

BRASIL: Dida (H), Cicinho (HH), Lúcio (H), Juan (HH), Gilberto (HH); Gilberto Silva (H), Juninho Pernambucano (HH), Kaká (HH), Ronaldinho Gaúcho (H); Ronaldo (HHH) y Robinho (HH).

Cambios: Zé Roberto (H) por Kaká, Ricardinho (H) por Ronaldinho y Ceni (H) por Dida.

Arbitro: El francés Eric Poulat. Amonestó a Kaji y a Gilberto.

Goles:
1-0, min. 34: Tamada.
1-1, min. 45: Ronaldo.
1-2, min. 53: Juninho Pernambucano.
1-3, min. 59: Gilberto.
1-4, min. 81: Ronaldo.

Hernán Bahos|DORTMUND
Brasil superó ayer el susto de verse perdedor por primera vez en el Mundial y con dos goles de Ronaldo y sendos de Juninho Pernambucano y Gilberto liquidó por 3-1 un partido que lo deja como líder absoluto del Grupo F y lo empuja a un choque con Ghana en los octavos de final.

El resultado, labrado en la mejor presentación de Brasil en lo que va del torneo, cortó de tajo las esperanzas de Japón de seguir en Alemania y consagró a Ronaldo Luiz Nazario de Lima como la gran figura.

El astro del Real Madrid desalojó ayer a Pelé del podio que compartían como máximos goleadores en la historia de la selección brasileña en el Mundial y con sus catorce igualó la marca del cañonero general de todas las copas, el alemán Gerd Müller.

El goleador del Mundial de 2002, que llegó al torneo alemán afectado por problemas físicos y escándalos personales, volvió ayer a callar la boca de sus críticos, que incluso presionaban para que fuera sentado en el banco.

Brasil cambió ayer cinco jugadores titulares en busca de respuestas en un partido que no ofrecía «riesgo», según el técnico Carlos Alberto Parreira, pero se encontró a un adversario sin complejos, que en el primer tiempo hizo de la necesidad de victoria su mejor aliciente para poner en aprietos a los campeones del mundo.

Cafú, Roberto Carlos, Emerson, Zé Roberto y Adriano dejaron sus puestos a Cicinho, Gilberto, Gilberto Silva, Juninho Pernambucano y Robinho.

Todos destacaron en sus respectivos oficios y no dejaron espacio para sentir «saudade» de los viejos titulares.