Vallori reconoce haber alucinado en su estancia en Suiza, aunque también que no piensa recalar en el fútbol helvético «casi regalado». «Poder jugar en un club así es un mundo aparte. El autocar, las instalaciones... son increíbles. Incluso los niños me pedían autógrafos tras los entrenamientos. Pero tengo claro que, si me voy fuera de España, será porque la oferta es buena. Hay que tener en cuenta que el nivel de vida en el país helvético es muy elevado y que, por ejemplo, el litro de gasolina diesel cuesta 1,80 euros. Además está el problema del idioma. Yo me defiendo bastante bien con el inglés, pero allí parece que sólo hablan alemán o francés y apenas puedo hacerme entender», señala.
El conjunto suizo se encuentra ahora en pretemporada y Vallori reconoce que «acabé muy cansado los primeros entrenamientos, porque la paliza fue importante. En el partido del miércoles, ante el SC Kriens, jugué de titular los primeros 60 minutos y creo que las cosas me salieron bastante bien. Cuando me retiré al vestuario empatábamos a cero, aunque al final el partido acabó 1-1». Sobre el nivel del Thun, asegura que «de centro del campo para arriba tiene muy buenos jugadores y parece que lo que falla un poco es la defensa, como demuestra que los cuatro que jugamos de titulares estamos a prueba con el equipo. Por eso, el técnico dice que, si me quedo en el equipo, tengo muchas opciones de ser titular».
Mientras tanto, el central pide tiempo a la Peña. «Ya le he explicado a Paco Marín como está el tema y le he pedido un poco de tiempo para ver la oferta del Thun y si me llega alguna propuesta de Segunda División B», añade.
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