El Barcelona regresa hoy a los entrenamientos después de diez días de vacaciones, pero con un asunto pendiente en su agenda sin resolver, como es la contratación de un delantero centro que tanto urge en el club, a tenor de las negociaciones que aún mantiene en este aspecto.

De esta forma, la petición del entrenador barcelonista, Frank Rijkaard, de poder contar con los nuevos refuerzos para la estadía que el club inicia hoy en Peralada (Gerona) hasta el día 7 no se hará efectiva, especialmente por los problemas que ha encontrado el Barça en el mercado de invierno, ya que ha conocido a muchos jugadores que no ha creído aptos para su equipo, mientras que los deseados no ha podido optar a ellos porque los clubes de origen se han negado a vender.

La idea inicial del Barcelona era contratar a dos jugadores: un centrocampista para el eje del medio del campo y un delantero centro. Debido a la inminente recuperación de Gerard López, el club considera que la plaza vacante del centrocampista la puede ocupar el futbolista catalán, quien concluye este año su contrato.

Diferente situación es la que se produce con el delantero. Tras la marcha de Luis García al Liverpool y la lesión de larga duración de Larsson, y las constantes bajas por lesión de Giuly, empujaron al club a peinar el mercado en busca de una ganga que no ha encontrado. Además, la opción de una cesión está descartada.