El Real Madrid se divierte y sacude al Albacete

REAL MADRID: Iker Casillas (**) Míchel Salgado (**), Samuel (**), Helguera (-), Roberto Carlos (**), Figo (**), Beckham (**), Guti (**), Zidane (***), Raúl (**) y Ronaldo (***).
Cambios: Mejía (**) por Helguera, Owen (**) por Figo y Solari (**) por Raúl.

ALBACETE: Gaspercic (*), Óscar Montiel (*), Gaspar (*), Buades (*), Peña (*), Redondo (*), Jaime (*), Àlvaro (*), Mark González (*), Francisco (**) y Pacheco (*).
Cambios: Momo (*) por Mark González, Iván Díaz (*) por Francisco y Rubén Castro (*) por Pacheco.

Àrbitro: Moreno Delgado (Comité catalán). Mostró cartulina amarilla a Peña, Alvaro, Montiel y Gaspar, del Albacete, y a Beckham, del Real Madrid.

Goles:
1-0, minuto 2, Ronaldo.
1-1, minuto 15, Francisco.
2-1, minuto 28, Zidane.
3-1, minuto 32, Raúl.
4-1, minuto 48, Samuel.
5-1, minuto 89, Owen.
6-1, minuto 91, Ronaldo.

Luis Villarejo|MADRID

El Real Madrid volvió a divertirse, a pasárselo bien en un campo de fútbol y ajustició al Albacete.

Le faltan por encajar piezas, pero este Madrid pre-invernal mostró su mejor cara. Ni Samuel, nervioso y fallón atrás, ni Beckham, en tierra de nadie, como eje del equipo, acaban de intregrarse. Sin embargo, el resto sí va queriendo parecerse al Madrid de otros tiempos.

Atisbar esta mejora ya es bastante. Porque hacía mucho tiempo que el Madrid no se gustaba en el campo. Hasta la llegada del Albacete, sus jugadores respiraban con alivio cuando sonaba el pitido final. Ganaban con agonía. Ayer, en cambio, se vio que tenían ganas de seguir jugando. Esta rehabilitación, que llega en vísperas de visitar el Camp Nou, va dar oxígeno al Real Madrid. De entrada, porque Zidane recuperó la autoestima. Sus bicicletas destrozaron a Óscar Montiel en la banda izquierda. Y es que Zidane dejó un carrusel de esos gestos que le permiten ser el mejor jugador del mundo de forma permanente. Puede estar mejor o peor, pero sus registros técnicos son indiscutibles. Para ilustrar ese poderío basta destacar el zurdazo del 2-1. Ser ambidiestro en el fútbol ya discrimina a los buenos de los muy buenos. El golpeo seco y colocado de su gol con la izquierda deleitó seguro a Gaspercic, el meta del Albacete, que nada pudo hacer en su estirada.

El Albacete aguantó sólo un cuarto de hora. Hasta que Francisco hizo el 1-1. Vino el gol después de un error en el despeje de Samuel, que se convirtió en protagonista del partido. Primero por su patada al aire que dejó a Francisco en ventaja para batir a Iker. Y segundo por la reacción que tuvo el argentino al marcar de cabeza el 4-1. Se vengó Samuel con un gesto a la grada, que no gustó al personal. El fondo sur, al que «dedicó» su gol, le pasó factura el resto del partido. Justo en un día, donde Mejía, que suplió al lesionado Helguera, va aumentando presencia con su notable puesta en escena. El Albacete defraudó. Jugó con demasiado respeto. Hizo pocas faltas y en el juego aéreo estuvo despistado.

Que el trío Figo-Zidane-Raúl funcione ayuda al Madrid a salir airoso. En pleno festival madridista, Ronaldo, «picado», se quiso incorporar al vagón de los jugones. Su última media hora fue eléctrica. Y Madrid abordó su partido más fácil de la temporada y el brasileño culminó con el 6-1.