El Barcelona extiende su racha a la Champions

BARCELONA: Valdés; Belleti, Puyol, Oleguer, Van Bronckhorst; Edmílson, Xavi, Deco; Giuly, Ronaldinho y Etoo.
Cambios: Larsson por Giuly; Iniesta por Deco y Fernando Navarro por Oleguer.

SHAKHTAR DONETSK: Lastuvka; Rat, Lewandowski, Stoican, Barcauan; Tymoshchuk, Duljaj, Matuzalem, Vukic; Marica y Brandao.
Cambios: Bakharev por Vukic y Vorobyey por Brandao.

Àrbitro: Terje Hauge (Noruega). Amonestó a Lewandowski y Van Bronckhorst.

Goles:
1-0, minuto 14, Deco.
2-0, minuto 64, Ronaldinho de penalti.
3-0, minuto 89, Etoo.

Javier Giraldo|BARCELONA

El Barcelona sumó su segunda victoria en la Liga de Campeones ante el Shakhtar Donetsk ucraniano gracias a dos acciones puntuales de Ronaldinho, (autor del segundo gol y asistente del primero) y a otra de Etoo en un encuentro en el que el equipo azulgrana desplegó su buen fútbol sólo a rachas. Por momentos, a los jugadores de Rijkaard les faltó velocidad y ritmo, pero el Barcelona demostró que tiene un amplísimo catálogo de recursos ofensivos: las subidas de los laterales, las paredes milimétricas o, simplemente, la calidad individual de sus jugadores.

Comenzó el Barcelona sacando el tiralíneas, trazando paredes y estudiando cómo desmontar el dispositivo de los ucranianos, que acumularon hombres por detrás del balón, temerosos de la capacidad ofensiva azulgrana. En una de esas acciones, el Barcelona abrió la lata. Ronaldinho conectó con Eto'o, volvió a recibir el balón y se lo dejó franco a Deco, que llegó desde atrás para convertir el 1-0 con un potente disparo que tocó el defensa Rat. El artífice de la Copa de Europa del curso pasado permitió así a los espectadores del Camp Nou celebrar el primer gol en Liga de Campeones desde que la Juventus eliminase al Barcelona en abril de 2003.

Ya se frotaba las manos la grada, hambrienta de una goleada de época, pero el equipo azulgrana no estuvo efectivo. No por falta de calidad, ni de actitud, sino de ritmo y velocidad. Cierto que Belletti taladraba poco a poco el lateral izquierdo de los ucranianos con sus internadas, pero sus centros al área no encontraron rematador. Perdidos y agazapados, los ucranianos se limitaron a intentar amarrar al Barcelona hombre por hombre y a lanzarse al contragolpe gracias la rapidez de sus puntas, sobre todo Marica, protagonista de la única acción peligrosa del Shakhtar en la primera mitad, bien neutralizada por Oleguer y Víctor Valdés.

El Shakhtar sólo empezó a creer en sus posibilidades en el descanso, y ofreció una cara más atrevida en la reanudación. Ganó metros, se soltó y estiró líneas hasta meter el miedo en el cuerpo al Barça. Pero no tardó en volver a imponerse la superioridad azulgrana. Tuvo que ser Ronaldinho, que provocó un penalti cuando su equipo más lo necesitaba. El brasileño Ronaldinho se hizo cargo del lanzamiento y alivió al Barcelona. Samuel Etoo cerró la cuenta sobre el tiempo al culminar una buena acción de Andrés Iniesta.