26/08/04 0:00
Luis Miguel Pascual|ATENAS
Las dos medallas olímpicas logradas en doma por Beatriz
Ferrer-Salat en los Juegos de Atenas, plata por equipos y ayer
bronce individual, consagran a una «purasangre» olímpica que ha
logrado sacar del anonimato a un deporte de escasa tradición en
España. A lomos de «Beauvalais», la hija del malogrado presidente
del COE, Carlos Ferrer Salat fue determinante en la consecución de
la plata por equipos, a la que también contribuyeron Juan Antonio
Jiménez y Rafael Soto, y puso el broche de oro a una actuación
brillante con la consecución del bronce individual.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Periódico de Ibiza y Formentera
De momento no hay comentarios.