X. Cruz25/06/04 0:00
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El estado de convulsión que vive la selección española ha acabado afectado directamente al Mallorca. Apenas un día después de que Iñaki Sáez anunciara su despedida, todos los focos se dirigieron hacia Luis Aragonés. Parecía el hombre de consenso, la figura más relevante del fútbol español en la actualidad, pero a última hora de ayer la Federación Española de Fútbol (RFEF) se puso en contacto con Juande Ramos, con el que podría llegar a un acuerdo en breve ya que el técnico manchego se encuentra actualmente sin equipo. Fuentes de la propia RFEF confirmaron a esta redacción que Aragonés seguirá en el Mallorca, pese a que se contempló su nombre para relevar a Sáez.

La salida del técnico vasco parecía abrirle la puerta a Aragonés, que el miércoles ya dejó claro que esta vez no le giraría la cara a la selección. Los medios informativos de la capital anunciaban un trato inminente, toda vez que la federación aceptara la renuncia de Sáez. Sin embargo, todo ha dado un giro espectacular y la RFEF considera que Juande Ramos es la mejor opción para dirigir al combinado nacional. Entre otras cosas, porque no tendría que negociar con ningún equipo la rescisión de su contrato. Con Luis tampoco debería hacerlo, porque sólo hay un acuerdo verbal entre el técnico y el Mallorca, pero se encuentra ante la tesitura de tener que dejar a un club sin entrenador a estas alturas de pretemporada.

Y todo se deberá realizar con una celeridad extraordinaria, porque España tiene un primer compromiso el 18 de agosto en un amistoso contra Venezuela en Las Palmas y luego se encontrará con el inicio de la fase de clasificación para el Mundial de 2006, en un partido a disputar el 8 de septiembre contra Bosnia en Sarajevo. Eso precipita los acontecimientos, siempre y cuando la RFEF no tomase la determinación de situar a alguien de forma interina al frente de la selección.