El vencedor en esta ocasión fue lo de menos, pero es justo
reconocer los méritos del francés Cyril Després (KTM), ganador de
varias etapas y tercero en la clasificación general final, quien a
pesar de no tener ningún interés en el empeño salió a disputar la
jornada como un día más y en menos de un cuarto de hora (14.49)
cerró su participación en esta edición de la carrera africana. Por
detrás de él, a apenas diez segundos, entró el noruego Pal Anders
Ullevalseter (KTM), quinto en la clasificación general final y el
sueco Per Gunnar Lundmark (KTM), que atravesó la línea de meta del
control horario con un retraso de 47 segundos.
Sin embargo no fueron más que meras estadísticas, pues todo el
centro de atención se encontraba única y exclusivamente en conocer
al ganador de la carrera, pues aunque la ventaja de Nani Roma
parecía lo suficientemente clara, en una competición como el Dakar
no se puede cantar victoria hasta que te bajas de la moto.
De hecho, el propio Nani Roma comentó tras bajar del podio que,
a dos kilómetros de la llegada al campamento se encontró con un
accidente de varios vehículos en el que no se vio involucrado por
los pelos: «pero afortunadamente no sucedió nada y ahora empiezo a
ver y reconocerme como ganador, lo cual es una verdadera
satisfacción», reconoció un pletórico Roma.
Aunque salió con el único objetivo de marcar a Sainct, lo cierto
es que al salir en orden inverso a la llegada de ayer, situación
que sólo se produce en la última jornada, Nani Roma tenía por único
objetivo marcar a su rival, pero al parecer un problema mecánico,
de difícil explicación, podría haberle retrasado inesperadamente en
este último día y, de hecho, respecto al piloto de Folgueroles hoy
cedió más de siete minutos, cuando a priori afrontaba la jornada a
escasamente cinco del español.
No era previsible ningún cambio en la clasificación, salvo
desastre, pero el propio Nani se encargó de «tranquilizar» a todos
hasta que se llegase a lo más alto del podio, como así fue.
En coches, el británico Colin McRae (Nissan) fue el vencedor
indiscutible de la etapa, pero el ganador de la carrera estaba
claro desde hace muchos días. El francés Stephane Peterhansel pasó
a engrosar la reducida lista de vencedores de la prueba africana
tanto en la categoría de motos como en la de coches, en la que
junto a él sólo se encuentra otro francés Hubert Auriol. José María
Serviá (Schlesser) se despidió de la vigésimosexta edición del
Dakar con una segunda posición el último día, si bien en la general
final los problemas mecánicos le relegaron a la décimonovena
posición.
En otro orden, el mallorquín Antoni Manresa, enrolado dentro del
Equipo Epsilon y a los mandos de un MAN, logró ser el primer
español en la meta de Dakar en su primera participación en la
prueba africana. Manresa, compañero de Pep Vila, fue 21º en la
última etapa, aunque en la general obtuvo un meritorio lugar 13º
que supone todo un éxito para un equipo recién estrenado en la
competición más dura y selectiva del desierto. Las 23 horas, 35
minutos y 45 segundos que perdieron respecto a los ganadores en la
categoría de camiones, los rusos Tchaguine, Yakoubov y Savostine,
no son distancia para un equipo que en su próxima incursión aspira
a llegar más lejos y arrebatar al victoria a los rusos, auténticos
dominadores de la especialidad más dura y que cierra la larga
caravana que ha recorrido Àfrica.
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