Valero Rivera, entrenador del FC Barcelona, dejará el club
azulgrana después de treinta y siete años, los últimos veinte como
entrenador del primer equipo, con el que logró un historial
inigualable de sesenta y nueve títulos, que aún podría ampliar si
antes del final de esta temporada consigue los de la Liga ASOBAL y
la Copa del Rey.
Precisamente, el último de ellos lo logró el pasado 27 de
octubre en Valladolid, con la victoria del FC Barcelona contra el
BM Valladolid (30-29), en la final de la octava edición de la
Supercopa de Europa y que representó el quinto título de la
competición para el conjunto azulgrana.
Rivera llevó al FC Barcelona a ser el conjunto europeo con mayor
número de títulos en competiciones continentales, con un total de
diecisiete: 6 Copas de Europa, 5 Recopas, 5 Supercopas de Europa y
una Copa EHF.
También ha sido el entrenador con más encuentros europeos
disputados, con un total de 203 en los que ha sumado 156 victorias,
13 empates y 34 derrotas. La Supercopa de Europa de este años fue
el tercer título oficial de la temporada para los azulgranas,
después de sus victorias en la Liga de Los Pirineos y en la
Supercopa de España. A partir de ahí, el equipo ha vivido una
pesadilla en la segunda mitad del mes de diciembre, en el que
perdió parte de sus opciones al título de Liga, situado a tres
puntos del Ciudad Real, después de que el día 17 perdiese en la
cancha manchega por 30-28.
La peor derrota
El día 20, el Barca fue eliminado de la Liga de Campeones en
octavos de final, por el Fotex Veszprem húngaro, al perder en la
cancha magiar por 31-26 y no poder aguantar la ventaja del 33-39
logrado en la ida en el Palau, algo que no sucedía desde hacía
dieciséis años. Y el pasado 28 de diciembre perdía la final de la
Copa ASOBAL frente al Ciudad Real por un humillante 29-18, la
derrota más contundente sufrida por el equipo de Valero Rivera en
los últimos quince años, posiblemente el detonante de su adiós.
«Cuando pensaba en cómo abandonar la entidad, siempre deseaba
que fuese como hoy: con clase y señorío», señaló el técnico
barcelonista. Por su parte el presidente Joan Laporta garantizó que
«el club queda a su disposición» y dijo que Valero ha establecido
una relación «directa y fluida». Valero Rivera cree que con su
adiós también descargará en cierta forma de la presión que podría
sufrir su hijo, Valero, quien juega en el primer equipo.
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