La Federación balear de kárate aspira a obtener un mínimo de seis medallas y un máximo de ocho en el Campeonato de España infantil de kárate que el Poliesportiu Insular de Blanca Dona acogerá el sábado y el domingo, según declaraciones del director técnico de la entidad federativa, Ramón Carmona. La selección balear comenzó ayer a trabajar al completo, con sus cuarenta y dos integrantes, bajo la supervisión del director técnico y del seleccionador balear de kumite, Francisco Mota. Carmona sustituyó al seleccionador de kata, quien no podrá desplazarse a Eivissa hasta mañana por motivos laborales.

Seleccionadores y seleccionados llegaron puntuales a su cita en Sant Antoni, donde trabajaron en grupos divididos de kumite y kata, siendo el primero el más numeroso con karatecas de categorías infantil, alevín y júnior. El trabajo en esta concentración será mucho más específico centrado en el modo de enfrentarse a la competición. Entre los seleccionados hay un subcampeón de España en el 2002 en kárate kumite, mientras que en kata Balears obtuvo una medalla de bronce el año pasado.

El hecho de que la competición sea individual hace más abierta la competición y , por tanto, más dura la lucha por los puestos de podio. En este sentido, Mota, quien declinó hacer ninguna predicción en cuanto a medallero, comentó que la competencia «es muy fuerte y todo depende de la suerte, de cómo están los chavales y de si los nervios afloran porque el factor psicológico también influye mucho». Ante un panorama nacional, el técnico de kumite considera que la selección puede hacer un buen papel y que el rival más fuerte sin duda será cualquier luchador de Madrid, donde el nivel técnico es muy alto al igual que el número de licencias, unas 15.000.