Sin ninguna posibilidad

CAJA RURAL CANARIAS (14+28+25+14): Sánchez (14), Summer (16), Rovira (4), Pelaez (5) y Bethany (17)- cinco inicial -. También jugaron Montesdeoca (8), Quintero (7), Alamo (8), Ruiz, Vega (2) y Urquijo (0)

CB PUIG D'EN VALLS (15+13+8 +14): Sarekgou (4), Morales (21), McWilliams (9), Silvinha (11), Alonso (5) - cinco inicial -. También jugaron Morro, Verdugo, Barranco, Boleda y Jiménez.

Àrbitros: Uruñuela y San Cecilio (Colegio catalán). Exclusiones a Hendry (35 ).

Pabellón: Principe Felipe. 3.000 espectadores.

Pedro Bañeres| ÀREA 11 (ZARAGOZA)

El PDV no pudo avanzar en su sueño copero y se cayó de él en el primer capítulo. El equipo ibicenco tuvo que dejar paso a un Caja Rural Canarias que se mostró muy superior y solamente en el primer cuarto y gracias a una espectacular Silvia Morales, pudo mantener ciertas esperanzas, que mediado ya el segundo cuarto se desvanecieron. No pudo hacer más el equipo ibicenco, que acabó siendo como un juguete en manos de un Caja Rural Canarias netamente superior.

Tito Sobrín alineó de salida a Alonso de base, Morales de escolta, Andrea de alero, Saregkou de ala-pivot y McWilliams de pivot. El electrónico se fue a 11-2 antes de los cinco minutos y, curiosamente, habían anotado las cinco titulares del equipo canario. Sobrín, a pesar de lo que se anunciaba como una debacle, no solicitó tiempo muerto confiando en la reacción de sus jugadoras y su confianza tuvo premio, sobre todo gracias a la exhibición de lucha, garra y pundonor de Silvia Morales, que recuperó hasta cuatro balones, propiciando un esperanzador parcial de 0-5. El equipo ibicenco culmina yéndose al final del primer cuarto con un punto de diferencia (14-15), con seis puntos de Silvinha y cuatro de Morales.

En el comienzo del segundo cuarto, sin embargo, se registró otra pájara del PDV, que encaja un parcial de 12-3 para un marcador de 26-18, destacando Bethany y Sánchez. El Caja Rural Canarias íba a más y el PDV a menos, lo que anulaba todo el trabajo realizado al final del primer cuarto.

A los dieciseis minutos, Tito Sobrin introduce los dos primeros cambios y Morro y Jiménez sustituyen a Saregkou y Morales, con 33-25 para las canarias, pero la salida de Morales debilita todavía más a las isleñas y la diferencia de las cajistas se alarga hasta los catorce puntos, con un dato significativo: de los veintiocho puntos anotados por el PDV, veintiuno de ellos fueron a cargo de Silvinha y Morales, lo que habla bien a las claras del escaso acierto de sus compañeras.

En el tercer cuarto, el descalabro balear fue total y es que todo comenzaba mal, ya que Alonso y Sarekgou cometían su tercera falta personal a los veintidos minutos. Por el contrario, Sammer y Bethany causaban estragos en la zona, tanto en ataque como en defensa, y capturando la mayor parte de los rebotes. El PDV se vino entonces abajo y sus jugadoras comenzaron a hacer la guerra por su cuenta, no pudiendo parar el tiro exterior de Rosi Sánchez ni ninguna otra de las virtudes del equipo canario, que comenzó a comportarse como una apisonadora. Al acabar el tercer cuarto (67-36), todo estaba ya decidido.

En este último cuarto, los entrenadores reservaron a sus jugadoras importantes y dieron minutos a las que menos juegan. No hubo ya tensión ni emoción. Estaba todo decidido y el PDV cerraba su primera participación copera.