Valencia 0
Roma 3

VALENCIA:Cañizares, Reveillere, Ayala, Pellegrino, Fabio Aurelio; Rufete, Albelda, Baraja, Vicente, Sánchez y Carew.
Cambios:Kily González por Vicente, Aimar por Rufete y Carboni por Pellegrino.

ROMA:Antonioli, Samuel, Aldair, Zebina, Candela; Cafu, Emerson, Tommasi, Lima, Totti y Cassano.
Cambios:Fuser por Totti, Guigou por Cassano y Cufré por Zebina.

Àrbitro:Frank De Bleeckere (BEL). Amonestó por el Valencia a Rufete y por el Roma a Zebina y Samuel.

Goles:
0-1, minuto 23, Totti.
0-2, minuto 29, Totti.
0-3, minuto 35, Emerson.

Efe|VALENCIA

El Roma acabó con el mito de Mestalla en la Liga de Campeones y con rotundo 0-3, con Totti en papel estelar, puso fin a una racha de 22 partidos sin conocer el Valencia la derrota en su estadio, en un duelo que los italianos solventaron en la primera parte, gracias a una efectividad absoluta en sus remates a puerta. El desenlace del partido fue todo lo contrario que apuntaba la lógica: la mejor defensa del torneo, ante el peor ataque. Un equipo en alza, ante otro desahuciado. Pero los romanos golearon y reavivaron sus opciones de seguir en la competición a la vez que menguaron las de los valencianistas, que se lo jugarán todo en sus próximos dos encuentros ante Ajax, en Amsterdam, y frente al Arsenal en Mestalla.

El equipo de Rafa Benítez afrontó el partido con el significativo contratiempo que supusieron las molestias físicas de última hora de su estrella, Pablo Aimar, aunque el ánimo de los valencianistas no se resintió. Pese a las ocasiones y mejor juego del Valencia, el Roma apeló al tradicional fútbol práctico italiano, y en su primer remate entre los tres palos, Totti cabeceó un saque de esquina y adelantó al conjunto dirigido por Fabio Capello.

El tanto descentró al Valencia, que seis minutos después fue cazado en un rápido contragolpe de los italianos, que de nuevo su estrella Totti se encargó de transformar con habilidad en el 0-2. Demasiado premio para el Roma o castigo para el Valencia, cuando aún no se había alcanzado la media hora.

Los españoles comenzaron a encadenar errores y a desdibujarse sobre el terreno de juego ante un Roma, que jugaba a placer y que en un nuevo contragolpe le clavó la puntilla al Valencia con un tercer tanto, obra de Emerson, que dejaba el partido sentenciado.