El Real Madrid, líder de la Liga, no quiere dar emoción a la competición y, pese a la decepción de la eliminación en la Copa de Europa, aspira a conquistar los tres puntos frente al Espanyol, hoy, a las 20.00 horas, en el Santiago Bernabéu, para cerrar prácticamente el acceso del resto de aspirantes al título. Vicente del Bosque, entrenador del Real Madrid, va a seguir con los mismos planteamientos que durante toda la temporada, es decir, va a contar con el mismo bloque de jugadores, al menos hasta que matemáticamente haya conseguido el título. Raúl ha conseguido recuperarse de las molestias que padecía y ayer se entrenó con el resto de la plantilla, aunque a menor ritmo. Si fuera cualquier otro jugador, lo más lógico sería pensar que se reservaría para posteriores encuentros, pero tratándose de él todo se invierte.

Guti, por el contrario, no consiguió finalizar el entrenamiento. El tobillo del jugador madrileño no aguantó la prueba y se quedó fuera de la convocatoria. Otra baja con la que contará el técnico salmantino es la de Roberto Carlos, por sanción, cuyo puesto será cubierto, con total seguridad, por Santiago Solari. El resto, los de siempre. «Mantendremos el grueso del equipo. Es el momento de hacer el penúltimo esfuerzo», aseguró Del Bosque.

Físicamente el Real Madrid está cansado, como el resto de equipos de la competición, y la mayor duda radica en comprobar si como aseguran los jugadores, el palo de Munich está olvidado. El estadio Santiago Bernabéu parece haber perdido, en los últimos partidos, la inviolabilidad que había mostrado durante casi toda la temporada y el Real Madrid quiere volver a ser fuerte en casa como seguro para alcanzar el triunfo de Liga.

El Espanyol apurará en el Bernabéu su última oportunidad para jugar la Copa de la UEFA la próxima temporada, objetivo que el técnico blanquiazul, Paco Flores, ve posible si su equipo gana los cinco partidos que restan para que finalice el campeonato. Tras caer eliminado en las semifinales de la Copa Cataluña, donde el conjunto barcelonés cayó ante el Balaguer de Tercera División (1-0), Flores, quien reservó a sus mejores hombres para el partido contra el Real Madrid, ha hecho varios cambios en la convocatoria. El defensa Toni Soldevilla, el centrocampista Jordi Lardín y el delantero Oscar García han pagado los platos rotos de la derrota ante el conjunto ilerdense, y se han quedado en Barcelona.