El Unicaja viajó ayer a Yugoslavia para medirse hoy, a las 18'00 horas, en la vuelta de la final de la Copa Korac al Hemofarm, encuentro que afrontan los malagueños con 30 puntos de ventaja (77-47), renta que debe ser más que suficiente para alzar el primer título de la historia de este club.

El conjunto malagueño, donde milita el alero ibicenco Paco Vázquez, no quiere ningún tipo de confianzas, ya que está concienciado del potencial del baloncesto yugoslavo, sobre todo cuando juega con el ambiente a favor. Pese a ello, el Unicaja se mostró muy superior en todos los aspectos del juego en el partido disputado la pasada semana en el Palacio Martín Carpena de Málaga, por lo que en el equipo andaluz se reconoce que sería una gran decepción no conseguir este título. Los jugadores del Unicaja saben que se van a encontrar un pabellón completamente lleno, donde los 5.000 aficionados yugoslavos ejercerán una fuerte presión.