Desde el principio se invirtió un ritmo muy fuerte y el viento
entró tanto de costado como de frente, haciendo mucho más difíciles
las evoluciones de los corredores, pero tanto el Festina del líder
como el Kelme Costa Blanca, con muchos intereses para sucesivas
jornadas, pero también dispares, estuvieron siempre muy atentos
para evitar sorpresas desagradables.
Con todo, se produjeron algunas escaramuzas delante que cuajaron
con mayor o menor fortuna, pero cuando llegó el momento de la
verdad todos los favoritos estuvieron a la altura de las
circunstancias, con protagonismo especial para uno de ellos, el
alemán Jan Ullrich (Telekom).
El corredor teutón cumplió durante toda la jornada, pero desde
su equipo y en círculos cercanos se comenzó a filtrar la noticia de
su abandono, que corroboraba el hecho de que se convocase una
conferencia de prensa del equipo para las 20:00 horas en su hotel
de concentración. Los Juegos Olímpicos y Mundiales tuvieron su
parte única y exclusiva de culpa en tal decisión. Pero mientras eso
se producía o no, lo cierto es que el alemán estuvo toda la jornada
muy pendiente de los acontecimientos de la carrera y cuando en los
kilómetros finales y por culpa del viento se produjo un corte de 27
corredores, él y todos los favoritos estaban ahí, excepción hecha
de Tonkov y Zülle.
En la llegada, los equipos italianos, todavía con corredores
habituados a las llegadas, fueron quienes tomaron la iniciativa y
se disputaron la victoria, pero Petacchi, que ya ganó la etapa de
Vinaroz-Aventura se mostró más fuerte que sus compatriotas y ganó
la etapa, en la que sólo destacó la pérdida de seis segundos por
parte de Igor González de Galdeano (Vitalicio), con todos los
favoritos en el grupo y Zülle y Tonkov cediendo nuevamente
terreno.
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