Los refuerzos para afrontar los cambios de categoría que se han
producido en el panorama del baloncesto insular comienzan a estar
al orden del día. El club Sa Graduada, que recientemente adquirió
la plaza abandonada por el Ca Nostra, cuyo primer equipo ni
siquiera militará en Segunda, busca en Catalunya refuerzos para
afrontar el ascenso y la nueva categoría.
El proyecto que lidera el presidente del club, José Luis de la
Osa, pasa por asegurar la continuidad en la nueva situación del
primer equipo, pero manteniendo el amateurismo en la plantilla. La
pasión por el baloncesto supera en Eivissa al profesionalismo,
según De la Osa. El presidente del Sa Graduada ha confirmado que un
jugador catalán, con experiencia en Primera y que militado esta
temporada en el conjunto barcelonés Bosco Orta, formará parte del
club. De la Osa no ha querido adelantar nada sobre este presunto
'fichaje' del que sólo ha trascendido que acude a Eivissa para
trabajar. De la Osa ha confirmado el fichaje de los ex jugadores
del Ca Nostra, Lino, Chiqui y Oliver Salas, lo que supone que, al
tener cerrada la plantilla -contando con todos los jugadores del
año pasado, según indicó el directivo colegial-, el Sa Graduada
jugará en la nueva categoría y de este modo zanja las reservas que
se mantenían al respecto.
Por otra parte, el ascenso de categoría supone para el club un
desembolso al menos cuatro veces mayor del que disponía el año
pasado para todos los equipos, incluidas las categorías inferiores
tanto femeninas como masculinas. Como botón de muestra, Sa Graduada
cerró el año pasado con un gasto de 1'5 millones, sin embargo la
previsión para la próxima temporada sube a los seis millones de
pesetas. «El tema del presupuesto está muy avanzado y prácticamente
lo tenemos cubierto», ha dicho De la Osa quien mantiene contactos
con varias empresas.
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