TXEMA GARCÍA - HOLANDA
Holanda es el equipo más goleador del torneo (13 goles en 4 partidos), mientras que sólo Noruega, eliminada en la primera fase, ha encajado menos tantos que la defensa italiana. Así, en el Amsterdam Arena se verán las caras la apuesta arriesgada y valiente de los de Rijkaard ante el catenaccio de los de Zoff. Un gol temprano de Italia puede poner a prueba la capacidad y el carácter de los holandeses, pero la «naranja mecánica» también puede hacer pasar a la defensa italiana los peores momentos del campeonato.

Los holandeses no convencieron en sus dos primeros encuentros en los que se impusieron a la República Checa, con un tanto de penalti en los últimos minutos, y a Dinamarca, tras sufrir mucho. Pero a partir del choque ante los franceses la maquinaria de los tulipanes ha comenzado a funcionar. De la mano de la inspiración de Dennis Bergkamp, un muy acertado Zenden y el acierto goleador de Patrick Kluivert, los holandeses respondieron a las críticas de Johan Cruyff a su juego y despejaron de golpe y porrazo todas las dudas ante Yugoslavia. Aún así, Rijkaard no quiere que su equipo sea presa de la euforia y el triunfalismo.

Mientras, Italia ha conseguido cumplir de largo con las expectativas del equipo en este torneo. Tras la pobre impresión dejada en su fase de clasificación y en los partidos amistosos nadie apostaba por los transalpinos para estar entre los cuatro finalistas, pero una vez más la «squadra azzurra» ha demostrado que, cuando las cosas van en serio, hay que contar siempre con ella. A pesar de no haber entusiasmado con su juego, el equipo de Dino Zoff ha conseguido salvar todos sus compromisos con una gran facilidad. La seguridad de su defensa, la mejor del torneo junto a la de Portugal (0'5 goles por partido) unido al acierto arriba de Totti e Inzaghi han permitido a Italia sumar victorias.