EFE - HOLANDA
Los jugadores de la selección holandesa disfrutaron ayer de su día libre en sus propias casas y no volverán a la concentración en Hoenderloo hasta la noche.

Los holandeses, que llevaban concentrados desde el pasado 29 de mayo, salieron desperdigados en busca de un poco de tiempo libre en el que olvidarse durante un momento del fútbol y de la tensión. «Ésta es nuestra tercera semana juntos, en la que hemos estado ocupados con el fútbol y los entrenamientos. Necesitaba estar con mi familia. Todos necesitamos un poco de relax», dijo el barcelonista Patrick Kluivert.

Los jugadores holandeses están especialmente nerviosos tras su apurada victoria por 1-0 ante la República Checa en el primer partido disputado el pasado domingo. «La victoria contra los checos supuso un respiro pero, al mismo tiempo, nos hemos dado cuenta de que tuvimos mucha suerte», afirmó el atacante holandés.

Por otra parte dos de cada tres holandeses siguieron el debut victorioso de su selección en la Eurocopa. Los datos de audiencia de la televisión registraron cuotas de más del 66 por ciento durante el encuentro, aunque, según un estudio, la mayoría de los espectadores quedaron defraudados con el juego desplegado por el equipo entrenado por Frank Rijkaard.