Claudio López y Mendieta abrazan a Angulo tras conseguir el primer gol para su equipo. Foto: EFE.

4 VALENCIA: Cañizares, Angloma, Djukic, Pellegrino, Carboni, Gerard, Farinós, Mendieta, Kily Gónzalez, Angulo) y Claudio López.

Cambios: Albelda por Angulo, Sánchez por Gerard y Ilie por Claudio López
1 BARCELONA: Hesp, Reiziger, Frank de Boer, Puyol, Guardiola, Cocu, Gabri, Rivaldo, Zenden, Kluivert y Dani.

Cambios: Bogarde por Puyol, Litmanen por Dani, Simao por Zenden
GOLES:
1-0, m.9: Angulo. 1-1, m.26: Pellegrino, en propia puerta. 2-1, m.42: Angulo. 3-1, m.45: Mendieta, de penalti. 4-1, m.92: Claudio López.
ARBITRO: Urs Meier (SUI). Mostró tarjeta amarilla a los valencianistas Farinós y a los barcelonistas Gabri y Puyol.
INCIDENCIAS: Incidencias: partido de ida de las semifinales de la Liga de Campeones disputado en el estadio de Mestalla ante 48.000 espectadores.
Una nueva noche épica europea del Valencia (4-1) le sirvió ayer para poner contra las cuerdas al Barcelona en las semifinales de la Liga de Campeones. El partido despertó a los nueve minutos. Miguel Angel Angulo aprovechó un rechace en el área barcelonista para inaugurar el marcador. Un fallo de Ruud Hesp poco tiempo después hizo rondar el segundo gol local por el marcador.

Pese a estos condicionantes favorables al equipo de Héctor Cúper, el Barcelona empezó a tomar el control del juego y del partido. Sin embargo, un balón enviado al palo por Kily González fue recogido por el Piojo López desde fuera del área y aunque superó a Hesp el árbitro anuló el tanto por falta previa. La suerte que le fue esquiva al Valencia para encontrar el segundo gol se la encontró de cara el Barcelona a los 26 minutos para empatar. El argentino Mauricio Pellegrino introducía el balón en la meta de Cañizares. El Barcelona siguió marcando la pauta pero se encontró con el peor final del primer tiempo que ni en la peor de sus pesadillas se podía imaginar. Del 1-1 que reflejaba el marcador a cuatro minutos del descanso se encontró con un 3-1 antes de retirarse a los vestuarios fruto de un nuevo gol de Angulo y otro, de penalti cometido por Puyol. La presión del Valencia desde el inicio del segundo tiempo, situaba al Barcelona en su campo e impedía al equipo catalán salir al ataque. Hesp evitó el cuarto gol de los locales con una buena intervención ante un disparo seco de Mendieta desde dentro del área. El encuentro tuvo destellos de calidad a lo largo de este periodo, con ambos equipos centrados en su trabajo, aunque estuvo ausente de ocasiones claras de gol. El Piojo ponía la guinda al pastel con el cuarto gol y las esperanzas blaugranas por alcanzar la final menguaron notablemente y todo pasa por otra noche mágica en Barcelona.