Castigo ejemplar para el Barça

El Barcelona alegó que la convocatoria del partido para el día 24, que realizó la Federación Española, era «nula de pleno derecho», que vulneraba «los derechos deportivos, sociales y económicos del FC Barcelona», y reiteraba su intención de jugar el partido el 16 de mayo.

El Comité ha declarado que no es de su competencia pronunciarse sobre la «pretendida nulidad de pleno derecho de las resoluciones de la RFEF de 22 y 23 de abril», como señalaba el Barça, y que parte «de la validez de la resolución federativa, sobre cuya legalidad, no cabe efectuar pronunciamiento alguno».

Competición, a la vista de las alegaciones formuladas por FC Barcelona y Atlético de Madrid, considera probado que «a través de su capitán, y confirmando así el acuerdo de la Junta Directiva, plasmado en un documento que se entregó al árbitro, decidió no jugar».

Para el Comité se trata de un caso de «incomparecencia», y no de imposibilid de jugar como alegaba el club azulgrana, que se incardina en el artículo 107 de los Estatutos. El Comité no se considera «habilitado para apreciar la concurrencia de fuerza mayor esgrimida por el alegante». Competición señala que «tampoco cabe atender la petición que, con carácter, último y subsidiario formula el FC Barcelona de que se declare la inexistencia de infracción y el archivo del expediente porque existió una infracción del ordenamiento deportivo».