300 barcos en ruta

A dicha presentación acudieron la presidenta del Consell Insular, Pilar Costa, y el conseller de Turisme, Josep Marí Ribas, además de otras autoridades de la zona como el concejal de Deportes del Ayuntamiento de Barcelona, Albert Batlle, y representantes de Winterthur, de la Federación Catalana de vela y Pepe Farrés, presidente de ANAM, organizadora de la prueba, junto a entidades como Fomento del Turismo de Eivissa.

Al acto asistieron unos 400 regatistas interesados en la XIII edición de una prueba que se ha convertido en la regata de altura más importante del mediterráneo. Entre las novedades de este año figura el aumento considerable de la participación en la versión Este, con salida desde el CN de Denia, que podría igualar o superar al número de inscritos en la versión Norte, que sale desde Barcelona.

Como posibles factores que expliquen este efecto está la menor distancia de la versión Este y, sobre todo, la mayor benevolencia de las condiciones meteorológicas en la regata desde Denia.

Pero la principal novedad este año es la primera edición del Pont Marítim Pitiús-Formentera 2000 en el que se pretende incluir a Formentera en los actos de la Ruta de la Sal. Para ello el domingo 23 de abril, día del libro, todos los regatistas de las dos versiones que lo deseen podrán participar en una regata abierta que unirá las dos islas Pitiüses. La salida se dará a las 12h del domingo para cubrir las 12 millas de separación entre Eivissa y Formentera. Una vez en el muelle se celebrará una barbacoa para todos los presentes.

Como en años anteriores, paralelamente a la regata, la organización instalará en el puerto de Ibiza Nueva una carpa en la que se atenderá a los interesados y participantes en la regata. Además, el viernes por la noche habrá fiesta en el Keeper y El Divino.