EFE-BURDEOS
El Valencia se juega en Burdeos gran parte de su futuro en la Liga de Campeones, ya que una victoria contra el Girondins ampliaría notablemente sus posibilidades de clasificarse a los cuartos de final, mientras que con una derrota podría quedar ya eliminado del torneo.

En estos momentos, el Valencia, tras cuatro jornadas disputadas, ocupa la tercera plaza del Grupo B de la segunda fase de la Liga de Campeones con seis puntos, mientras que Manchester, con nueve, y Fiorentina, con siete, ocupan la primera y segunda plaza, respectivamente. Los franceses, con un sólo punto, cierran la clasificación.

Para este partido, Héctor Cúper no puede contar con el hispano argentino Claudio López, quien se encuentra sancionado, aunque ha viajado a petición propia, con el resto de los jugadores para estar junto al equipo en este crucial encuentro.

El partido llega para los valencianos en un momento delicado, pues tras completar una serie de buenos partidos, el pasado domingo volvió a ofrecer su pero cara ante el Deportivo de A Coruña en Riazor, en un partido que los valencianistas perdieron por 2-0 pero en el que pudieron salir goleados. La ausencia de Claudio López puede dar entrada en el equipo a Sánchez, aunque otra opción es la inclusión de Oscar.