EFE-Bruselas
España, en el grupo C, ha vuelto a ser un conjunto afortunado. Si en el Mundial logró el que se supone más sencillo, José Antonio Camacho puede volver a bendecir su fortuna en los sorteos, porque en esta ocasión tampoco ha salido malparado. Noruega es un equipo potente físicamente, con jugadores curtidos en la liga inglesa, pero cuyo estilo de juego sabe contrarrestar España, que le ha derrotado en las categorías inferiores en repetidas ocasiones. Yugoslavia asusta por la calidad de sus jugadores, pero no convence como selección. Ha recurrido a Vujadín Boskov para poner orden en un grupo de futbolistas repartidos por toda Europa. Eslovenia era la selección apetecida. Llega a un torneo importante por primera vez, gracias a que se vio favorecida por un grupo débil, en el que también estuvo Noruega (Grecia, Albania, Letonia y Georgia).

Alemania e Inglaterra, como hace cuatro días en la fase previa del Mundial, han quedado emparejadas en el grupo más complicado de la Eurocopa 2000, en un sorteo que volvió a favorecer a la selección española, que en principio no deberá tener problemas para reafirmar su favoritismo. Junto a estos forman el grupo A Portugal y Rumanía, dos conjuntos que llegaron a la fase final como los primeros clasificados del grupo 7, en el que los rumanos quedaron líderes.

El grupo B, con Bélgica como cabeza de serie por ser país anfitrión, pondrá a prueba la capacidad competitiva de la de Italia de Dino Zoff, un conjunto que despierta más dudas de las esperadas. La impecable trayectoria de Suecia en la fase previa, en la que relegó a Inglaterra a la «repesca», y las dificultades que puso Turquía a Alemania hacen prever una complicada primera ronda para la selección italiana.

En el grupo D, la potente selección de Holanda puede tener problemas para confirmar su condición de cabeza de serie, frente a la República Checa, Francia y Dinamarca.