José Ramon Marí se despachó ayer a gusto ante lo que considera una tremenda injusticia arbitral. Foto: VICENÇ FENOLLOSA.

Las recientes resoluciones del Comité de Competición Balear en contra de los intereses de la Peña Deportiva de Santa Eulària y la actitud arbitral el pasado miércoles en el Peña-Cardessar no han sentando nada bien en el seno del club ibicenco, según su presidente. Las quejas no se han hecho esperar y José Ramon Marí, ha destapado la caja de los truenos amenazando incluso con retirar al equipo de la categoría en función de las próximas decisiones del Comité.

«Hay una persecución por parte de la Federación Balear, no sólo hacia la Peña sinó a todos los clubs ibicencos. Este año lo pagamos nosotros porque estamos arriba», afirma con rotundidad el máximo responsable de la entidad santaeulariense. Tras el Peña-Poblense de hace dos semanas, el delantero Jorge fue sancionado con cinco partidos y el club multado con 30.000 pesetas por «incidentes del público». El club va a recurrir por ambas resoluciones. «Me parece absurdo que por una lata vacía nos sancionen», se queja Ramon Marí.

El colegiado Garza Maisanava, que dirigió el partido del miércoles entre la Peña y el Cardessar, expulsó a Toño y sacó amarilla a Iván. Ninguno de los dos podrá jugar el domingo. El árbitro también ha elaborado un anexo al acta del partido en referencia a posibles incidencias con público, técnicos y directivos. Al cierre de esta edición el Comité aún no se había reunido ayer para deliberar sobre las posibles sanciones de la jornada. «Según lo que haya puesto en el acta estoy dispuesto a enviar una carta a todos los estamentos a nivel nacional, prensa y donde haga falta. También puedo plantear en una Junta abandonar la tercera balear. Nos están machacando», afirma molesto el presidente.