La imagen fantasmagórica de las gradas de Can Misses puede tener
sus días contados si cristaliza la intención y voluntad de la
concejalía de Deportes del Ayuntamiento de Eivissa.
Roque López, concejal de Deportes del consistorio, afirmó ayer
que el objetivo es acabar las gradas"la parte central"en al año
próximo, con la probable colaboración del Consell, según sus
propias palabras. «Creo que en el 2000 podemos hacer la reforma de
las gradas centrales, impermeabilizarlas, derribar los extremos y
hacer el tabique de los bajos, donde irán ubicadas las oficinas de
las delegaciones deportivas», explicó ayer López. Este proyecto
tendría un coste aproximado de 30 millones y la idea es acometerlo
el año próximo, con el apoyo del Consell Insular, incluyendo la
obra en el Pla de Obras i Servicios o en el Plan de Instalaciones
Deportivas. La consellera Fanny Tur y el propio concejal asistieron
hace unas semanas a un acto en el campo de fútbol, donde la
responsable del área deportiva del Consell pudo comprobar in situ
el lamentable estado de las gradas. El Patronato de Deportes y el
Consell podrían repartirse los gastos de esta obra inicial, que
supone el primer paso para reconstruir y acomodar no sólo el
estadio de Can Misses sinó todo el complejo.
Como ya adelantó Ultima Hora Ibiza y Formentera
hace tres semanas, el Ayuntamiento tiene decidido hacer frente a la
reforma de la instalación que lleva ocho años en estado de dejadez,
con un proyecto global y ambicioso. El arquitecto municipal ha
ultimado un informe a petición de la concejalía, donde determina
hasta que punto la estructura que hay en pie en las gradas
inacabadas es aprovechable. «En este informe se muestra que tras
los análisis realizados de la estructura, ésta presenta
deficiencias pero son subsanables con un coste asequible de 3 ó 4
millones», señaló el Concejal.
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