La general no sufre cambios importantes en sus primeros puestos
y sigue comandada por el estadounidense Lance Armstrong, seguido
del español Abraham Olano a 7:44, de los suizos Alex Zuelle y
Laurent Dufaux a 7:47 y 8:07 y del también español Fernando
Escartín a 8:53 minutos. En esta ocasión la escapada de la jornada
llegaba antes que en etapas anteriores, pues hacia el kilómetro
nueve se formó un grupo con dieciséis corredores con representación
de los cuatro equipos españoles: Luis Pérez (ONCE DB), Vicente
García-Acosta y Miguel Àngel Peña (Banesto), Pascual Rodríguez
(Kelme CB) y Francisco Cerezo (Vitalicio Seguros).
Junto a ese quinteto estaban el suizo Roland Meier, el austriaco
Totschnig, los italianos Fanfranchi, Commesso, Serpellini y
Piccoli, los franceses Mengin, Giunti y Lebreton, el belga Farazjin
y el ruso Konischev, que poco después no pudo seguir y se quedó. De
todos ellos, el mejor clasificado era el italiano Paolo Lanfranchi,
a casi 35 minutos del líder Armstrong que, en la primera parte de
la carrera perdía a su compañero de equipo, el rodador danés Peter
Meinert-Nielsen. A las primeras de cambio, el líder se quedaba
también sin su compatriota Vaughters, cuya función iba a ser la de
echarle un cable en la montaña al ser un buen escalador. Por el
avituallamiento, hacia mitad de carrera, la situación seguía siendo
la misma, aunque la diferencia de los escapados llegaba casi a los
16 minutos, que fue en aumento a medida que se acercaba la meta
para llegarse a los 19 a falta de unos 60 kilómetros y la máxima en
meta, de 22:22.
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