Mucho donde elegir sin un número 1 claro | Arguiñe Escandón

Son días muy ajetreados para las jugueterías de Ibiza. Tras atender los pedidos que les realizaron los duendes de Papa Noel para la noche del 24 de diciembre ahora toca hacer lo mismo con los que les han hecho llegar los pajes reales para que Melchor, Gaspar y Baltasar dejen los regalos adecuados en cada una de las casas de Ibiza durante la noche del 5 de enero.

Sin embargo, en este recién inaugurado 2018 y por primera vez desde hace varios años, los pajes reales no tendrán un favorito claro por el que decantarse en las jugueterías de nuestra isla. No hay un número 1 destacado y eso beneficia a las tiendas y pone nervioso a más de un encargado de hacer las compras porque se encuentran mucha más variedad para elegir. «Aunque siempre hay juguetes que gustan más que otros y que son más solicitados por los pequeños en sus cartas en esta ocasión no hay uno que se esté agotando por encima de los demás como ha sucedido en otras Navidades y eso hace que sea más complicado acertar, debido a la gran oferta que hay actualmente», explicó ayer a Periódico de Ibiza y Formentera, Esperanza Tur, responsable de la Juguetería Tur, situada en la calle Bisbe Huix de la ciudad de Ibiza.

A pesar de esta variedad si es cierto que hay juguetes que son más solicitados que otros. De ellos, Esperanza Tur destaca por encima de todos la colección de muñecas L.O.L. Surprise que llevan arrasando a nivel mundial desde antes del verano. Se trata de unas muñecas que miden menos de 5 centímetros, cuestan unos 15 euros y su gran éxito se basa en la intriga, ya que consiste en un huevo parecido a los Kinder formado por siete capas que se desembalan hasta descubrir un mensaje secreto que da pistas sobre el club de la muñeca, unas pegatinas, un biberón, zapatos, ropa, un accesorio sorpresa y, al final, la muñeca dentro de una bola de color dorado.

Además, siguen funcionando muy bien algunos de los clásicos que parecen no pasar de moda. En este caso Tur destaca todo el universo de la marca danesa de juegos de construcción Lego y los muñecos Playmobil, con su amplia variedad «y los grandes, los XXL, de casi un metro, que se están vendiendo muy bien».

Otros clásicos que nunca faltan en una carta a los Reyes Magos, sobre todo entre los adultos, son los juegos de mesa como el Monopoly, el Trivial o el Risk. Junto a ellos, cada año se suman cada vez más los juegos de rol y la sorpresa de estas Navidades, el Cara Splash de Hasbro, un juego emocionante y lleno de diversión y suspense en el que los niños tienen que colocar la cara en una máscara y esperar mientras la tensión crece al dar vueltas a las manivelas ya que el brazo lanzador puede saltar en cualquier momento.

Peonzas, la Switch y un moco viscoso

Entre el mundo de las consolas hay un ganador por encima de los demás. Se trata de la Nintendo Switch, lanzada oficialmente en marzo de este año y cuyo precio en el mercado puede oscilar entre los 320 y los 340 euros. Eso sí, nunca se pueden descartar los videojuegos de las ya clásicas Play Station 4 o XBox.

Por último, los pajes reales tampoco se olvidan durante estas navidades de las peonzas, aunque en una versión mucho más avanzada, electrónica, con luces y pistas para lanzarlas, los pequeños monopatines que se usan con los dedos de la mano, y el Crazy Slime, ese moco viscoso de gelatina que ofrece muchas posibilidades y que ahora se puede crear en tu propia casa.