Dos agentes de Criminalística se desplazaron a Ibiza para inspeccionar el escenario del incendio.

La Guardia Civil investiga la autoría del incendio intencionado que la madrugada del 20 de noviembre afectó a una veintena de vehículos presentes en el depósito municipal de Sant Josep, un fuego que calcinó por completo un total de catorce vehículos.

Tras la primera inspección ocular del escenario, la policía judicial de la Guardia Civil de Ibiza empezó a trabajar sobre la hipótesis de un fuego intencionado. Dos días después, el escenario del devastador fuego fue inspeccionado minuciosamente por dos agentes de Criminalística especializados en incendios y llegados desde Palma.

Los resultados de los análisis todavía no se han recibido, pero varios indicios dirigen la investigación hacia un escenario intencionado y ya se avanza en esta dirección, recabando datos sobre el posible móvil del incendio.

Catorce vehículos calcinados

El incendio se inició minutos antes de las 07.00 horas del pasado 20 de noviembre. Las llamas se originaron en un punto donde se encontraban retirados cuatro ‘taxis pirata' y junto a un muro divisor con un depósito anexo en el que había un centenar de vehículos entre turismos, furgonetas y motos.

Los trabajos de extinción se prolongaron durante dos horas en medio de pequeñas explosiones originadas por los neumáticos de los vehículos que estaban envueltos en llamas. Los bomberos necesitaron más de 12.000 litros de agua para apagar el virulento incendio y evitaron que los daños fuesen mayores.